El Gobierno federal aloja en el complejo penitenciario de Puente Grande, Jalisco, a 18 presos de peligro con extradiciones autorizadas hacia Estados Unidos, la mayoría de ellos vinculados a las grandes organizaciones criminales que operan en el país.
Entre estos internos del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) de Occidente están 10 miembros de cinco distintos cárteles de la droga en México: el del Golfo, La Familia Michoacana, de Sinaloa, de Juárez y el hegemónico en el estado: Jalisco Nueva Generación (CJNG).