Este jueves la panista Margarita Arellanes rendirá su Primer Informe de Gobierno como alcaldesa de Monterrey.

En el evento, que se celebrará en el Teatro de la Ciudad, no sólo se espera la asistencia de Gustavo Madero, presidente nacional del PAN, sino de la plana mayor del CEN albiazul y del grupo panista que la impulsa.

Arellanes destacará como parte medular de su discurso el tema de seguridad con la contratación de 900 nuevos policías que están ahora bajo las órdenes del contralmirante Augusto Cruz Morales.

El contraataque del PAN para contestar el golpe que asestó esta semana la Sedesol federal a la alcaldesa Margarita Arellanes, debe de venir la próxima semana desde el Congreso del Estado.

Para los panistas la inhabilitación por 15 años que sufrió Miguel Ángel Treviño Sandoval, secretario de Planeación de Monterrey, no es más que un ataque ordenado por el PRI para golpear a la panista, que encabeza las encuestas en Nuevo León para el 2015.

Hoy reciben a la Mesa de la Justicia de Desarrollo Urbano de San Pedro con una cachetada jurídica del edificio que más atacó la administración de Ugo Ruiz.

Y es que los socios de la torre de Plaza Tanarah consiguieron una suspensión contra los sellos de clausura que aplicó el Ayuntamiento de San Pedro.

El Municipio clausuró porque negó la posibilidad de utilizar la torre como un hotel, pero con la suspensión van para atrás los fielders.

Los panistas en el Congreso del Estado hacen cuentas, vuelven a contar, pero no les alcanza para conseguir los 22 votos que necesitan para nombrar a Armando Rodríguez Corona como consejero de la Judicatura.

Hace un mes Alfredo Rodríguez, coordinador del grupo legislativo del PAN, convocó a los legisladores albiazules y todos, sin excepción, apoyaron la candidatura de Rodríguez Corona.

Con el voto del ahora perredista Erick Godar, la designación de Rodríguez Corona como integrante del  Poder Judicial del Estado era un asunto de trámite.

La verdad es que el alcalde de San Pedro, Ugo Ruiz, no ganó ningún round contra la Torre Tanarah y no puede en este momento, por más que quiera, demoler el polémico edificio.

Los propietarios  de Tanarah cuentan con una suspensión provisional –incluso confirmada en segunda instancia por un Tribunal Colegiado- que impide que el Municipio inicie los trabajos de demolición de este desarrollo inmobiliario.