El OSO RUSO es acosado por la WADA y algunos Comités Olímpicos, entre ellos el de Estados Unidos, que a solo DOS semanas de su arranque, solicitan el castigo extremo de excluirlos de los Juegos de Río por los temas de dopaje que aún no reciben sentencia.
Las Federaciones Internacionales son más prudentes y vetarían casos individuales.