No hay peor ingrediente para unas elecciones, que ya se caracterizaron por la ausencia de propuestas y concurrencia de acusaciones, que el Congreso no haya podido ponerse de acuerdo para aprobar las leyes secundarias del Sistema Nacional Anticorrupción. Quizás los senadores no lo han medido, pero su falta de acuerdos será un misil para todos los candidatos y de todos los partidos. Ya el ambiente estaba convulso pero con esto se inhibirá la participación y la credibilidad de los partidos quedará nuevamente en entredicho. En pocas palabras, es un ingrediente explosivo.

Este domingo cerraron campañas la mayoría de los candidatos a las gubernaturas que están en juego. Y a pesar de que se acortaron los tiempos de campaña, lo que no se ha logrado es que en estas jornadas se privilegie la propuesta y no el lodo y la guerra sucia.

Roberta Jacobson llegó a México por la tarde y lo hizo de manera sobria y de bajo perfil. Dio un pequeño pronunciamiento en la Sala de Usos Múltiples en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y advirtió que esperará a entregar sus cartas credenciales para poder hacer un pronunciamiento oficial.

Vaya sacada a balcón le dieron al candidato del PRI al gobierno de Sinaloa, Quirino Ordaz, con el audio que se dio a conocer en redes sociales, y que como se supo ayer, derivó en una denuncia ante la Fepade por parte del Partido Acción Nacional. En la llamada el candidato se pone de acuerdo con el presidente municipal de Culiacán, Sergio Torres, para recibir apoyo de la estructura municipal. La verdad es que en esta etapa de la campaña no sólo queda mal parado Quirino, sino que también su partido, que va por todos lados asegurando que ya se renovó y es un nuevo PRI.

Lo dijo el propio secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong: con los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación habrá mano firme, que no es lo mismo que dura. Y pues se podrán hacer miles de interpretaciones entre lo que es una y lo que es la otra, pero lo cierto es que con la mano firme lo que se ha evitado es aquellos bloqueos que enloquecían a la Ciudad de México y capitales en los estados como Oaxaca. Yo creo que los propios maestros han de decir: si mano firme es suspendernos por faltar a clases, ahí la paramos.