Pep Guardiola recetó una sopa de su propio chocolate a sus exdirigidos, en una demostración de contundencia y buen futbol.
Dos goles de Ilkay Gündogan y un tanto del belga Kevin de Bruyne determinaron el triunfo para el Manchester City por 3-1 sobre Barcelona, en la cuarta jornada de la Liga de Campeones de Europa.
El triunfo fue el primero para los citizens en seis enfrentamientos directos en Champions League ante los azulgranas y la primera de Pep contra el conjunto que lo vio nacer como jugador y entrenador.
Messi adelantó a los suyos al minuto 21 y cuando parecía que los catalanes saldrían con el botín completo del Etihad Stadium, Guardiola y los suyos dictaminaron lo contrario.
Poco antes de terminar la primera mitad, Gündogan encontró el empate, prometiendo lo mejor para la segunda parte.
En el complemento, el encuentro comenzó de ida y vuelta, con un City buscando al frente con una propuesta frontal, la cual rindió frutos al 51’ por producto de De Bruyne, quien marcó de tiro libre hacia el poste de Marc André Ter Stegen.
Minutos más tarde, una escapada de Luis Suárez hacia linderos del área habilitó a André Gomes frente a la portería de Willy Caballero, pero el portugués la estrelló al travesaño desaprovechando con ello los azulgranas la oportunidad para empatar.
Jesús Navas entró al campo y revolucionó al City del Pep al asistir hacia Sergio Agüero en diagonal; el “Kün” se pasó, pero el balón le rebotó y a la deriva le cayó a Gündogan, quien envió de nuevo la pelota a las redes.
Con el resultado Barcelona se quedó en nueve puntos, pero conserva el liderato del Grupo C, mientras que Manchester City mantiene la segunda posición con siete unidades.
