Descaro extranjero
Con dos palabras definiría la actitud del jugadorazo Humberto “Chupete” Suazo: Qué descaro y qué cinismo. Y me explico: su calidad no la cuestiono, su productividad tampoco; su indisciplina, su egoísmo, su descaro, su falta de vergüenza, su cara dura, eso sí, porque a final de cuentas él es un jugador profesional de futbol que ha firmado un contrato y los contratos se firman después de leerlos y estudiarlos, por eso los hacen profesionales, y firman su contrato para honrarlo, pero estos se firman no por su historial, porque entonces tendrían que firmarlos en un museo.
Alfredo Domínguez Muro
Con dos palabras definiría la actitud del jugadorazo Humberto “Chupete” Suazo: Qué descaro y qué cinismo. Y me explico: su calidad no la cuestiono, su productividad tampoco; su indisciplina, su egoísmo, su descaro, su falta de vergüenza, su cara dura, eso sí, porque a final de cuentas él es un jugador profesional de futbol que ha firmado un contrato y los contratos se firman después de leerlos y estudiarlos, por eso los hacen profesionales, y firman su contrato para honrarlo, pero estos se firman no por su historial, porque entonces tendrían que firmarlos en un museo.
Se firman por lo de hoy y por lo que viene
Y por supuesto en la proyección de Suazo es muy diferente el contrato que firmó el año pasado bajo presión, de él al Monterrey, que el que firmó en 2007 cuando salió del Colo-Colo como un gran goleador. Usted recordará que lo pretendía el Independiente de Argentina, pero éstos daban cacahuates y él lo que quería lógicamente, se avala y es legítimo, era el dinero.
Y vino a México
Pero desde el día que pisó nuestro país Humberto Suazo comenzó a presionar para irse al Independiente, se acuerdan de aquellas temporadas espantosas en las primeras semanas que se peleaba hasta con el aguador, hasta que alguien, seguramente su representante, le hizo ver que estaba devengando un sueldo muy importante en México y que el Independiente jamás le iba a dar la mitad de eso y medio se tranquilizó. Vinieron sus éxitos con la selección chilena y el Monterrey, por eso ganó lo que ganó, pero entonces…
Le dio por irse a Europa
El Zaragoza le hizo una oferta de esas espantosas que le hacen a los equipos mexicanos y que algunos tristemente se enganchan. El error de la directiva del Monterrey fue de dar ‘oro’ y recibir espejitos. Entregó al “Chupete” por un semestre, la mitad de una temporada, por nada. Rayados no recibió nada, lo único fue quitarse el sueldo y eso ¿en qué ayudó al Monterrey?. Como no funcionó en Europa regresó a México y comenzó a trabajar bien, se enganchó con el equipo, semestres extraordinarios, pero siempre con la inquietud de salirse, de ganar más dinero con esa ambición desproporcionada.
Y Monterrey le aceptó el capricho el año pasado
Cuando decidió no regresar de sus vacaciones y estuvo tres o cuatro semanas medio parado y ya se iba porque tenía otras ofertas, que nunca aparecieron, el famoso “petate del muerto”, lo convencieron de quedarse en México firmando un contrato muy ventajoso. Hoy él exige la firma de un contrato en condiciones de proyección similares a las que tenía en 2007, sólo que se le olvida que en ese año él tenía 27 o 28 años y hoy el Padre Tiempo no lo va a perdonar ni a él, ni a nadie, como no perdonó a David Beckham que no estuvo en la selección de Gran Bretaña a pesar del imán mercadológico que pudo funcionar. Así que Humberto Suazo…
Con un cinismo y un descaro espantosos
Dice que se va porque va a tener ofertas, quisiera ver esas ofertas y que fueran reales. Esto me recuerda algo que les voy a platicar: el caso del “Chupete” Suazo es muy parecido al de José Saturnino Cardozo, solo que el paraguayo tuvo más éxitos, es goleador histórico con Toluca, varios títulos con el equipo, pero de pronto él quiso renovar un contrato multianual y el entonces presidente Rafael Lebrija le dijo ‘no, multianual no, ya tienes 33 o 34 años’, dicen que tenía 37 porque estaban manipuladas las fechas de Cardozo, sólo lo sabrá él. Recuerdo el último partido de José Cardozo en Toluca contra Santos, ya no aguantaba un juego al ritmo que se requería, yo estaba en el palco de la directiva y ahí la esposa de Cardozo; cuando lo cambian y la gente lo abuchea de alguna manera…
La esposa de Cardozo se levanta
Y empieza a decir cualquier cantidad de improperios y groserías, lo menos que dijo fue: “Toluca pueblo pinchurriento”. Palabras más o menos: “Nosotros los Cardozo los pusimos en la geografía, ustedes no existían”. Me acerqué y le dije que lo que estaba diciendo era peligroso, retírese mejor, hasta que vino alguien de la directiva y se fue, pero ya la gente comenzaba a responderle. Si eso tenía la señora de Cardozo en la cabeza imagínese lo que tenía José Saturnino, mal agradecido, cierto, Toluca le pagó muchos millones de dólares que él desquito. Monterrey le ha pagado millones de dólares al “Chupete” Suazo y él lo desquita, ahí no ha habido errores, ni cochupos, ni trampas, aquí lo importante es que José Saturnino Cardozo en Toluca y Humberto Suazo en Monterrey creen que estuvieron hechos a mano.
Nos toca el caso Suazo
Y les diría que los contratos están hechos para honrarlos y le recordaría un frase de Nicky Lauda, el gran piloto, justo cuando la gente se metía con él, ya no ganaba carreras, después regresó y ganó el campeonato del mundo con McLaren, ahí se retiró y dijo: “En el automovilismo eres tan bueno como tu última carrera” y usted dirá, ¿El “Chupete” es tan bueno como el último partido de ayer ante Chivas que mete dos goles en seis minutos? Sí, pero se los están pagando muy bien, ya quisiera ver ahora que él está presionando a la directiva de Rayados esos contratos que dice qué tiene o qué va a tener, descarado y cínico es lo menos que le puedo decir a Humberto “Chupete” Suazo, un jugadorazo, pero con poca dignidad, honradez en lo de cumplir con lo que él mismo estipuló, nadie le está robando, les aseguro que hoy es uno de los jugadores mejor pagados en el futbol mexicano… Así de fácil.