En decadencia
En Pumas las cuentas simplemente no salen.
El proyecto por el que apostaron Rodrigo Ares de Parga en la presidencia del patronato y Juan Francisco Palencia en la dirección técnica del equipo, va en picada y las siete derrotas del equipo en los últimos ocho partidos de Liga lo confirman.
Pero lejos de tomar decisiones drásticas, la directiva le ha dado el espaldarazo a Paco, pese a no gozar ya de la simpatía de la afición universitaria en su mayoría.
Al equipo de la Universidad Nacional se le fue de las manos la clasificación del torneo pasado.
Juan Reyna Loa
En Pumas las cuentas simplemente no salen.
El proyecto por el que apostaron Rodrigo Ares de Parga en la presidencia del patronato y Juan Francisco Palencia en la dirección técnica del equipo, va en picada y las siete derrotas del equipo en los últimos ocho partidos de Liga lo confirman.
Pero lejos de tomar decisiones drásticas, la directiva le ha dado el espaldarazo a Paco, pese a no gozar ya de la simpatía de la afición universitaria en su mayoría.
Al equipo de la Universidad Nacional se le fue de las manos la clasificación del torneo pasado.
Tras ganarle a Jaguares de Chiapas en la Jornada 12 del torneo pasado y sumar 18 puntos, la Liguilla quedaba a “tiro de piedra” para los de El Pedregal.
Pero las lesiones de jugadores importantes como Pablo Barrera, aunado a la baja de juego de otros, hicieron que el objetivo trazado a principio de semestre y el cual cumplieron un torneo antes, se viniera abajo.
Pumas cerró con cinco derrotas consecutivas la temporada, incluidos tres descalabros en Ciudad Universitaria y dos humillaciones por 4-0 jugando como visitante ante Tigres y Morelia.
Para colmo, el equipo terminaría como penúltimo lugar de la Tabla General y la hinchada auriazul no daba crédito al desplome de su equipo.
Cuando parecía que la “guillotina” caería sobre Palencia, Ares de Parga metió las manos al fuego por él y en lugar de prescindir del técnico, “jubiló” a viejas glorias que aún quedaban en el equipo.
Fue así como le dieron las gracias a Darío Verón y al portero Alejandro “Pikolín” Palacios, además de otros futbolistas claves en anteriores momentos como Javier Cortés.
Y aunque Pumas arrancó con un comienzo ilusionante, en la primera jornada del campeonato, después de ganarle por la mínima diferencia al Pachuca, los siguientes dos cotejos han vuelto a parar las antenas de la rectoría y confirmar una decadencia o crisis de resultados.
¿En qué ha fallado la directiva? ¿Cómo podrían salir del atolladero? Aquí algunos puntos a destacar del actual presente que vive uno de los clubes insignias del futbol mexicano.
Paciencia a Palencia
Aunque la gente ya tenga una animadversión hacia Paco, si algo ha distinguido a la UNAM es no cortar los procesos de tajo, de manera sorpresiva.
Los técnicos con proyectos a largo plazo se le han dado y para muestra los nombres de Bora Milutinovic, Miguel Mejía Barón, Ricardo Ferretti y Hugo Sánchez, son sólo algunos nombres de entrenadores por los que Pumas apostó desde su formación.
Los anteriores hombres mencionados le dieron una identidad a Pumas y formaron jóvenes promesas que sostuvieron sus proyectos, inclusive llevando su gestión a la Selección Nacional en diversas facetas.
Con Palencia la apuesta parece ser riesgosa debido a que los resultados no lo avalan, no así el objetivo de su directiva quien desea marcar un nuevo proceso en la historia de la institución.
“Tenemos partidos, el equipo creo que el sábado no merecía perder, tampoco ganar; vamos a esperar”, declaró Ares de Parga.
Cantera fallida
Alan Mendoza, Kevin Escamilla, Luis Quintana, Jesús Gallardo, Josecarlos Van Rankin o José Antonio García son tan sólo algunos de los jóvenes surgidos de fuerzas básicas hace algunos torneos que aún están en proceso de consolidarse, de acuerdo a lo programado por la directiva de dar prioridad a la cantera, la bandera del proyecto de Ares de Parga.
De los mencionados, sólo Gallardo ha logrado llegar a Selección, luego de formar parte de la pasada Copa Oro.
En la actual gestión de Paco Palencia hay otros canteranos como Brian Figueroa o Pablo Jáquez quienes de manera reciente han debutado en el primer equipo, pero que todavía están lejos de marcar la diferencia.
Refuerzos sin ritmo
Mauro Formica y Joffre Guerrón fueron las principales contrataciones para este torneo, sin embargo, su integración al plantel ha sido de forma paulatina y no han podido hacerse presentes con goles en estos primeros cotejos.
Guerrón venía de un semestre de inactividad, mientras que Formica provenía de Newells Old Boys, aunque su carta pertenecía a Cruz Azul.
Del actual plantel, sólo Nicolás Castillo parece estar en sintonía y ha marcado dos de las tres anotaciones que lleva Pumas en el Apertura 2017; el chileno destaca por su sacrificio, al igual que el español Abraham González.
Es cierto que el torneo es joven, pero el lastre que arrastra Pumas es para analizar sobre qué futuro le depara.