La magia que le había permitido a los Pieles Rojas levantarse de una marca de 3-6 en la temporada y ligar siete triunfos que les permitieron entrar a los playoffs por primera vez en los últimos cinco años, llegó a su fin de una manera dolorosa.
Tras haber logrado tener la ventaja en el marcador, en el último cuarto los Pieles Rojas sufrieron la baja de Robert Griffin III, su quarterback que les había permitido irse al frente. Tras una acción en la que su rodilla derecha se torció, el joven mariscal de campo tuvo que abandonar el emparrillado y ahí comenzó el declive de Washington, que aceptó una anotación más y dos goles de campo, sentenciando su eliminación de la postemporada.
Con la victoria de los Halcones Marinos quedaron definidos los juegos divisionales, en los que por primera vez estarán presentes los Texanos.
El sábado los Bengalíes no pudieron aguantar y cedieron en la pelea para permitir que los Texanos avanzaran en la postemporada tras derrotarlos 19-13. En el que fue su primer juego de playoffs luego de 10 años de vida, los de Houston consiguieron interceptarle en tres ocasiones a Andy Dalton.
Ahora Houston tendrá la nada sencilla misión de enfrentarse a uno de los favoritos para coronarse, los Patriotas de Nueva Inglaterra.