En la MLS querer es poder jugar futbol
Mientras en Estados Unidos la MLS busca todas las alternativas para rescatar su temporada, en México la Liga MX determinó dar por concluido el certamen sin tomar en cuenta todas las opciones viables
Manuel CuéllarMientras en México la Liga MX canceló sus torneos sin decretar a un campeón, pero si otorgando ‘premios de consolación’ a los dos primeros lugares, en Estados Unidos la MLS está haciendo todo lo contrario, al buscar opciones para salvar la actual temporada, pese a que los casos de Covid-19 superan el millón de contagios.
La primera, y única, opción que tiene esta liga para reanudar sus actividades apunta a la magia y el encanto que tiene Disney World en sus instalaciones, pues dicho complejo de entretenimiento cuenta con una zona deportiva llamada ESPN Wide World of Sports Complex, donde, si bien no se compara con los estadios profesionales, reúne los requerimientos necesarios para ayudar al regreso deportivo.
¿Cuál es la magia que la MLS y la NBA ven en Disney si el estado de Florida registra más 50 mil casos infecciosos?, la respuesta se basa en la organización para planear eventos deportivos a nivel internacional, ya que el Wide World of Sports Complex es desde 2018 sede del Jr. NBA Global Championship, un torneo que recibe durante una semana a los mejores jugadores de entre 13 y 14 años de Norteamérica, Latinoamérica, África, Asia, Europa y Canadá.
Además de ese antecedente, el lugar cuenta con tres estadios, el HP Field House, el Visa Center y The Arena, aptos para el basquetbol y donde se pueden armar diferentes tipos de canchas, por lo que todo señala que será en un recinto de los antes mencionados donde se podrían disputar los partidos de la MLS.
Un punto extra que tiene el ‘mundo de Mickey’ es que cuenta con hoteles en el mismo complejo, esto facilitaría el traslado de los jugadores a la cancha y viceversa, evitando mayores riesgos ante la emergencia sanitaria.
¿México hizo lo correcto?
Con el ejemplo que Estados Unidos está poniendo, pese a que aún es una liga joven a comparación de la Liga MX, la pregunta sobre si México realmente no tenía opciones para continuar con el Clausura 2020 es la más constante en el mundo deportivo, y más cuando el número de contagios en nuestro país no se compara con Estados Unidos.
Es cierto que México no cuenta con instalaciones como las que tiene Disney para desarrollar un plan como el que tiene la MLS o la NBA; sin embargo, si tomamos como ejemplo las características que estas organizaciones están siguiendo para retomar la actividad deportiva, sí había opciones para que el Clausura 2020 continuara.
La diferencia es que no se jugaría en Guadalajara como querían algunos directivos, sino en la Ciudad de México teniendo a Ciudad Universitaria como única sede para evitar los riesgos y que el futbol se realice en buenos términos.
La ventaja de Ciudad Universitaria para que fuera única sede para reanudar el deporte en México son lógicas, ya que además de contar con el Estadio Olímpico Universitario como recinto principal, podría recibir otros encuentros en los diferentes campos menores, como por ejemplo la Cancha 2 donde solía entrenar el equipo principal. Además de esa, la UNAM contaba con otros cuatro espacios para retomar la iniciativa
Sin embargo, si dichos terrenos no cumplían con los estándares profesionales para disputar un partido, la Liga MX tenía una Opción B en Ciudad Universitaria, debido a que la Casa Club de Pumas cuenta con dos canchas profesionales, y prueba de ello es que el equipo femenil de los felinos juega en ‘La Cantera’ como local.
Respecto al hospedaje y traslados, es bien sabido por la afición y periodistas que los equipos que vienen a jugar a la Ciudad de México eligen los hoteles de Periférico Sur como sede de concentración, si alguno de estos recintos cumple con ciertas medidas de salubridad para albergar a los planteles, el traslado a dichas canchas sería de un máximo de 10 minutos, tomando en cuenta el lugar donde jugarían.
No obstante, aunque las opciones se tuvieron sobre la mesa ejecutiva de la Liga MX, el máximo organismo del balompié nacional decidió ignorar toda posibilidad de reanudar el futbol, obligando a los aficionados y jugadores a esperar un poco más para ver el balón rodar en México.