Ni el argentino Lionel Messi pudo salvarse de las sanciones de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) y la frase “la concha de tu madre” lanzada al juez de línea Emerson Augusto do Carvalho el 23 de marzo asado durante el partido clasificatorio de la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018 disputado entre Argentina y Chile hizo que el jugador se pierda de cuatro de los cinco últimos partidos de su selección.
De acuerdo con el máximo órgano mundial de futbol, el deportista violó el artículo 57 del Código Disciplinario de la FIFA por ejecutar “ofensas al honor y deportividad” al pronunciar palabras injuriosas contra un árbitro asistente.
“El que a través de palabras o gestos injuriosos, o por cualquier otro medio, ofenda el honor de una persona o contravenga a los principios de la deportividad o la moral deportiva, podrá ser sancionado”, indica el reglamento.
Messi no sólo será sancionado por cuatro partidos oficiales, sino que tendrá que pagar una multa de 10 mil francos suizos (unos 9300 euros).
El primer partido en el que se aplicará la sanción será el próximo encuentro entre Bolivia y Argentina, que se disputará este día.
El resto de la sanción deberá ser cumplida en los siguientes partidos de Argentina en la competición preliminar del Mundial.
La suerte de Messi no tocó a su puerta como al paraguayo Pablo Aguilar (América) y al delantero Enrique Triveiro (Toluca) quienes fueron sancionados por la Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol (FMF ) por agredir al equipo arbitral.
A Pablo Aguilar se le intrpuso una suspensión de diez partidos tras el cabezazo a Fernando Hernández luego de la eliminación de América, por cuenta de Xolos de Tijuana mientras que Triverio ocho juegos por jalonear a Miguel Ángel Flores en el encuentro Toluca-Morelia.
Pese a haber sido agredidos, el gremio arbitral decidió pronunciarse a favor de estos dos jugadores al considerar que fue injusta esta sanción.
Muestra de ello fue la suspensión de la Jornada 10 del Torneo de Clausura 2017 de la Liga MX pluego de que los árbitros designados para ella anunciaron que no se harían presentes en el terreno de juego, informó la FMF.
Aunado a ello, los silbantes anunciaron un paro de labores y la Asociación Mexicana de Árbitros (AMA) reiteró que las sanciones interpuestas a Aguilar y Triveiro no fueron aplicadas con base en el reglamento ni acuerdo al informe arbitral.
La presión ejercida por lo árbitros hizo que los jugadores fueran amonestados de forma menos estricta de modo que sólo fueron suspendidos un año del futbol mexicano.
Fue así que el pasado lunes 13 de marzo la AMA anunció que los silbantes estaban listos para pitar nuevamente los partidos del futbol mexicano.
Este día la selección mexicana jugará contra Trinidad y Tobago en el Hasely Crawford en el partido correspondiente al hexagonal final de la Concacaf rumbo a la Copa del Mundo Rusia 2018.
México además de buscar tres puntos en la cancha, los jugadores deberán controlar su temperamento si el árbitro pita en su contra o alguno será el nuevo Messi por no controlar su temperamento.
Con información de Agencias
