Con pocos reflectores pero conocedor del ADN de Cruz Azul, Juan Reynoso.
“A la afición nunca hay que cuestionarla, uno debe entender, como futbolista o como gente de futbol, que esta industria se mantiene por la afición”, asegura Humberto Valdés, parte del plantel campeón de Cruz Azul en 1997.
El reloj sigue corriendo y “La Máquina” no carbura. Los años pasan, técnicos, futbolistas y directivos desfilan por La Noria, pero el objetivo de lograr un título de liga, luego del Invierno de 1997 sigue siendo inalcanzable.
Con la llegada de Juan Reynoso la esperanza sube y baja, como se ha hecho costumbre con el club. En medio de problemas extracancha, asuntos judiciales y temas de reestructuración de la cooperativa, solamente un fichaje del renombre de Hugo Sánchez, Matías Almeyda o Antonio Mohamed hubiera logrado entusiasmar a una afición al borde de la desesperación.
Para Humberto Valdés, los años sin título y los constantes fracasos han volcado a la afición, bajo la escrutinio e influencia de los medios de comunicación, a la impaciencia e inquietud, sin permitirle, ni siquiera, el beneficio de la duda al nuevo entrenador.
“Si me preguntas si la afición le va a tener paciencia todo depende de cómo se manejan los medios de comunicación. Yo no veo una mala publicidad, mientras exista el ruido estás siendo publicitado. El equipo perdió contra Santos y ya la afición está cuestionando”, explica.
Juan Reynoso es más de lo que aparenta
En el papel, el acuerdo con el estratega peruano luce poco alentador para los hinchas; sin embargo, las credenciales de Reynoso, pese a ser más discretas, le dan un valor agregado a la institución, del cual han carecido en los últimos años: identidad y orgullo por los colores de Cruz Azul.
Ya con 13 años de experiencia como director técnico, desde su debut con el Coronel Bolognesi, con cinco títulos en el futbol peruano, hasta su paso por Puebla en el Guard1anes 2020, logrando su pase a los cuartos de final, el exdefensor central cuenta con un as bajo la manga: el título del Invierno 1997.
Valdés, analista deportivo desde su retiro de las canchas, destaca los méritos del nuevo estratega, quien ya ha demostrado tener la capacidad para dirigir en el futbol mexicano, son más que suficientes para encaminar al Cruz Azul al tan ansiado título.
“Está bien identificado y sabe lo que pasa dentro de la institución. Creo que hay que considerar que Juan ya fue campeón en Perú, ya participó en Copa Sudamericana. Pero yo creo que Juan tiene los argumentos necesarios para ser el técnico de Cruz Azul y de algún equipo importante”.
Aunque muchos parecen desdeñarlo, luego de haber sido un ‘plan B’, y con pocas expectativas generadas a su alrededor, Juan Reynoso, quien levantó el trofeo hace más de 23 años, conoce las entrañas del equipo y podrá aportar experiencia y liderazgo en los vestidores, además de contar con el apoyo de sus auxiliares, Óscar Pérez y Joaquín Moreno, todos parte de aquel título.
“Yo creo que la llegada de Juan en este momento es la correcta. Hoy por hoy la Cruz Azul como cooperativa y el club deportivo están pasando por una situación económica, si bien no vulnerable, complicada.
Y dentro de todas las opciones que se barajaban, a mí me parece que la llegada de Juan Reynoso es la idónea porque además de ser un personaje institucional, estuvo en el último campeonato de Cruz Azul en 1997
Sin contar con un diagnóstico acertado durante los últimos años, la directiva celeste ha apostado por costosos fichajes y grandes refuerzos extranjeros; sin embargo, sin una cantera que represente los colores del Cruz Azul con orgullo y pasión, los esfuerzos podrían seguir siendo en vano.
“Por ahí puede venir la diferencia, ahora solamente está el ‘Cata’ Domínguez con muchos años en la institución, pero no hay nadie más. No pasa por amar la camiseta que es un dicho muy trillado, que es de las cavernas, pero sentir los colores de tu playera es fundamental”, señala.
Revertir el panorama
Aunque aún es muy temprano para juzgar su trabajo, de seguir con los malos resultados, la presión y las críticas hacia Reynoso crecerán. Tras la derrota frente a Santos por marcador de 1-0, el estratega inca deberá apresurar su proceso de adaptación para comenzar a sumar unidades en el torneo.
