Este año, Bruce Lee cumple 46 años que ya no está físicamente entre nosotros, sin embargo su legado trascendió el tiempo y hoy su imagen resulta inevitable y cercana que parece que nunca se fue. Era un tipo extraordinario que entregó su vida a las artes marciales. Un tipo que incluso pudo vivir con sólo el 1 por ciento de materia grasa corporal para estar en equilibrio con su cuerpo y alcanzar la perfección.
La noticia se esparció el 20 de julio de 1973: el maestro ha muerto. Y a pesar del tiempo, varios misterios aún rondan su deceso. Las teorías que se han creado en torno a su fallecimiento son tan diversas y distintas que parece que no se perdona que una leyenda haya perdido la vida como una persona común.
La vida de Bruce Lee fue corta, falleció a los 30 años en Hong Kong, dos meses después de grabar The Way of the Dragon. A su muerte se le cuelgan varias causas, desde el consumo de drogas y la intervención de las mafias china e italiana, hasta una maldición familiar o los celos de maestros de kung-fu.
Marco Ocaña, quien ha publicado tres libros sobre la vida Lee, aseveró en una entrevista a El País que su fama radicaba principalmente en su filosofía de vida.
Narra que Bruce creía que un artista marcial debería ser capaz de adaptarse ante cualquier escenario, filosofía que le habría ayudado –agrega– a enfrentar el racismo que se encontró en Hollywood.
The Way of the Dragon
Durante la filmación de The Way of the Dragon (1973), Bruce Lee se hallaba en un estado crítico de salud, era su primer película en Hollywood y no quería desaprovechar esa oportunidad.
La presión era tan grande que habría tenido que refugiarse en el consumo de drogas ante la presión a la que se veía sometido. Incluso, uno de los doctores que lo vio meses antes de su muerte contó que Lee tuvo que ser atendido de urgencia porque su cerebro se había hinchado.
El porcentaje de grasa corporal recomendado por la Organización Mundial de la Salud es del 10-20 %, sin embargo, El País reveló que el artista marcial llegó a tener el 1%. El estrés lo había hecho perder 10 kilogramos, y aún con sus 60 kilos y su 1,71, insistía en grabar las escenas de la película.
La muerte
La muerte lo alcanzaría dos meses después cuando trabajaba para Juego de la Muerte. Visitó a la coprotagonista de esta película, Betty Ting Pei, en su casa de Hong Kong.
Ting Pei –según la versión oficial– le dio a Lee un analgésico llamado Equagesic porque sufría de un intenso dolor de cabeza. Sin embargo, el artista marcial habría reaccionado mal al medicamento (contenía un relajante muscular que le provocó alergia) y murió.
Linda C. Emery, esposa de Lee, confirmaría más tarde la información y pidió que no se especulara más sobre su muerte para no dañar la imagen de su marido.
Sin embargo, el médico personal de Bruce no creyó en la versión oficial, incluso narró que después de la muerte de su paciente los doctores que lo atendieron se habrían reunido y alguno de ello pidió que pasaran por alto el consumo de canabis en la versión oficial.
Esta teoría sería respaldada por Marco Ocaña, quien también coincide con ella, y aunque asegura no poder demostrarla, dice que hay varios factores que lo hicieron llegar a esta conclusión.