Sufrimiento. Es la palabra con la que vive la afición de Cruz Azul y no es para menos, la Máquina consiguió su boleto a la Final del Apertura 2018 con lo mínimo, al vencer 1-0 a Monterrey y empatar a uno el global, beneficiado por la posición en la tabla general.
Milton Caraglio pasó de villano a héroe al meter el único gol del encuentro al comienzo del segundo tiempo, al contrarrematar un disparo lejano de Adrián Aldrete que el portero Marcelo Barovero rechazó hacia el frente.
La anotación primero fue anulada por el juez de línea, pero desde el VAR le indicaron al central Fernando Guerrero que Caraglio no estaba en fuera de lugar, pues Jhon Stefan Medina lo habilitó.
El atacante celeste estuvo a punto de recibir el fantasma de la ‘cruzazuleada’, al fallar un penal en el primer tiempo, producto de una falta sobre Roberto Alvarado, tras otro rechace erróneo de Barovero a tiro del propio Caraglio.
Cruz Azul todavía tuvo oportunidad de meter más goles, pero Martín Cauteruccio, que entró por Caraglio en la recta final, falló en opciones claras frente a la portería.
Los Rayados solo necesitaban un gol para forzar al Azul a hacer tres, pero Diego Alonso optó por replegarse desde el inicio y cuando intentó ir al frente, la Máquina validó su liderato general y como mejor defensiva del torneo.
Cruz Azul ahora espera al ganador de este domingo entre América y Pumas.