Si la imagen de su lesión es espeluznante, los pronósticos que se dieron también resultaban difíciles de creer.
Tras haber sido operado de emergencia la noche del domingo por la grave lesión en su rodilla, se supo que la carrera de Zach Miller estaba en peligro, sino también su pierna e incluso su vida.
En su reporte del lunes por la mañana de la cadena ESPN, los cirujanos trabajaban en reparar el daño que sufrió una arteria, el cual se produjo cuando Miller se dislocó su rodilla, por lo que trataban de salvar su pierna izquierda.
Se le realizó una cirugía vascular al jugador de los Osos de Chicago, procedimiento muy delicado en el que se tendrá que ver cómo evoluciona la rodilla para saber si Miller puede volver a caminar.
Esta situación recuerda lo sucedido en 1994 con Napoleon McCallum, el exjugador de los Raiders se dislocó la rodilla en aquel año, lesión que fue considerada como una de las lesiones más grotescas de la historia de la NFL.
McCallum sufrió daño del nervio y la arteria, se le informó que su pierna tendría que ser amputada si la cirugía no resultaba, pero afortunadamente todo fue un éxito.
El año pasado hubo otro caso no tan grave. El mariscal de campo de los Vikingos, Teddy Bridgewater también se dislocó la rodilla en agosto del año pasado, pero no tuvo daño en una arteria o nervios. No ha jugado desde entonces, pero se habla que podría volver para la Semana 10 de esta temporada.
En el caso de Miller, se analiza la magnitud del daño que sufrieron la arteria y el nervio, eso no determinará si vuelve esta temporada, sino si puede volver a caminar y si su pierna le responderá de buena manera.
Gajes del oficio que acontecen en los emparrillados.
Una arteria de la pierna izquierda de Miller también habría sufrido daños luego de la acción en la que se dislocó la rodilla
9
