Apuesta riesgosa: Pemex será patrocinador de Force India
Pemex llega a la Fórmula Uno mediante el patrocinio al equipo Sahara Force India, donde corre el mexicano Sergio Pérez; sin embargo, lo hace en un momento en que enfrenta una crisis financiera y de legitimidad
Nayeli Meza y Manuel SebrerosA pesar de que Petróleos Mexicanos (Pemex) atraviesa por uno de sus peores momentos financieros, la empresa regresó, después de casi 40 años, a la Fórmula Uno como patrocinador del piloto tapatío Sergio ‘Checo’ Pérez.
La escudería Force India y Pemex confirmaron una alianza comercial para la temporada 2018, que permitirá a la petrolera mexicana ser visualizada en todos los circuitos del mundo. El logo de Pemex aparecerá en los retrovisores del monoplaza de la escuadra, en los trajes de los conductores, en la vestimenta del equipo y en otros activos.
No es la primera vez que la Empresa Productiva del Estado (EPE) incursiona en el máximo circuito. En 1980 participó por primera vez cuando patrocinó al mexicano Héctor Alonso Rebaque, quien estuvo presente en 58 grandes premios de la máxima categoría del automovilismo.
Sin embargo, en aquella época, Pemex había logrado grandes avances para la industria petrolera nacional y para el desarrollo económico del país. La realidad de hoy es otra. La empresa que dirige Carlos Treviño Medina lleva años sumergido en un socavón financiero del que no parece que vaya a salir pronto.
Entre los principales problemas de la petrolera se encuentra la pérdida neta de 333 mil 354 millones de pesos al cierre de 2017, debido a mayores costos financieros y un desfavorable tipo de cambio.
El monto fue 74.4 por ciento superior al registrado en 2016, año en que tuvo un detrimento por 191 mil 144 millones de pesos, de acuerdo con un reporte enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Además, a nivel social, Pemex, como la cara más fuerte del sector energético de México, vive un momento de descrédito de legitimidad ante los constantes incrementos en los precios de las gasolinas bajo el argumento de no tener los recursos suficientes para operar.
Aunado a esto, el patrocinio si bien va enfocado a la figura de Sergio Pérez, quien es el referente actual del automovilismo mexicano, el apoyo recae en una escudería que también enfrenta serios problemas económicos y su dueño, Vijay Mallya, tiene una orden de captura en la India por el quiebre económico de una aerolínea.
Como en las carreras, Pemex puede haber dado en el clavo y lograr la bandera a cuadros y beneficiarse del patrocinio, siempre y cuando Force India y ‘Checo’ Pérez se mantengan como los mejores entre los equipos competitivos pero que no aspiran a ganar el campeonato, como lo han hecho los últimos dos años, aunque por el contexto mexicano podría ser un despiste.
Líos de Pemex
Escándalo de corrupción
La Auditoría Superior de la Federación publicó en un informe que los pagos “improcedentes” y “excesivos” adjudicados por Pemex a Odebrecht superan los 707 millones de pesos.
Alza en precios de gasolinas
Desde enero de 2017, los consumidores han externado su molestia por el aumento gradual en el precio de los precios de las gasolinas en el país.
Finanzas débiles
La petrolera estatal reportó una pérdida por más de 333 mil millones de pesos al cierre de 2017.
‘Gastan en lo que no deben’
Frente a los problemas financieros y la crisis energética que se vive en México, Pemex debía invertir en otros aspectos que la ayuden a tener beneficios a largo plazo y no tanto en patrocinar el deporte profesional, consideró Alejandro Limón, investigador de Energía y Finanzas Públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
En el reporte de Pemex a la Bolsa de Valores, la empresa explica que la pérdida millonaria de 2017 se dio “en su mayor parte por el efecto de la aplicación de las normas contables internacionales (International Financial Reporting Standards, IFRS) en el rubro deterioro de activos fijos”.
Asimismo, Pemex detalla que en 2017 “protegió su balance financiero contra posibles caídas en el precio del petróleo a través de la contratación de coberturas petroleras” y para este año continuará “cubriendo el precio de la mezcla mexicana de crudo a 48.5 dólares por barril, de acuerdo con el precio determinado en el Presupuesto de Egresos de la Federación”.
Los ingresos de la petrolera se elevaron 24.3 por ciento interanual a 402 mil 477 millones de pesos en el trimestre, favorecidos por la recuperación de los precios del crudo y un incremento de 11.7 por ciento en el volumen de petróleo exportado, muestra el reporte de resultados.
“Espero que 2018 sea un año muy similar a 2017, también en términos de estabilidad en volúmenes e ingresos y diría que en términos de inversiones”, dijo Roberto Cejudo, subdirector de Tesorería de Pemex, en una llamada con analistas.
La petrolera produjo en promedio mil 881 millones de barriles de crudo al día (bpd) en el lapso octubre-diciembre, una baja de 189,000 bpd, por la declinación natural de campos.
En cuanto a la producción de petrolíferos, las seis refinerías de Pemex procesaron 574,000 bpd de crudo en el cuarto trimestre, un 27 por ciento menos que en el mismo lapso del 2016.
Esto se debió al mantenimiento de las refinerías de Madero, en Tamaulipas, y de Minatitlán, en Veracruz, con costas en el Golfo de México. También influyeron los daños que sufrió la refinería de Salina Cruz, en el sureño estado de Oaxaca, por sismos en septiembre y la tormenta tropical Calvin.
A la presión de sus finanzas se suma el descontento social que se ha generado por el aumento en los precios de la gasolina en el país. En tan sólo un año la Magna aumentó de 13.33 a 16.33 pesos por litro, un incremento de 22.5 por ciento.
Alejandro Limón adelanta que el panorama para Pemex seguirá complicado en el mediano y largo plazos, en momentos que deberá hacer frente a las críticas por el patrocinio en la Fórmula Uno.
“La fiesta deportiva de la petrolera se verá opacada por todos estos factores” y añade que “la última pieza de la reforma energética se colocará en el rompecabezas cuando llegue la próxima administración, ya sea que decida mantenerla o acabar con ella”.
Aunque los involucrados no proporcionaron detalles de la inversión en la F1 y tampoco el monto en el anuncio oficial, Reporte Índigo se puso en contacto con Pemex para solicitar información al respecto, pero hasta el cierre de esta edición no se obtuvo una respuesta.
Como marketing, la coyuntura le servirá
Aunque financieramente y ante la opinión pública no sea un buen momento para involucrarse en el deporte, Pemex se anotó un acierto a nivel de marketing al relacionarse en la Fórmula Uno como patrocinador del equipo Sahara Force India.
De acuerdo con Héctor Quispe, director de Comunicación Integral para el Deporte (CID), el marketing busca generar oportunidades con los elementos que cuenta y la F1 se presenta como una gran opción por la proyección que tiene en México, así como por la figura del piloto Sergio Pérez.
“El marketing aprovecha coyunturas y fue el mejor momento para decir aquí está Pemex, de representación nacional, es una marca que ha dado solidez al pueblo mexicano en el plano económico y que está apostándole a este tipo de eventos con mucho futuro. Sergio Pérez es mexicano, la carta mas fuerte del automovilismo mexicano y que tiene mucho futuro en Force India”, resaltó Héctor Quispe.
Pemex demostró precisión al anunciar el patrocinio al mismo tiempo en que se dio a conocer el monoplaza de Force India, el cual correrán durante 2018 el mexicano ‘Checo’ Pérez y el francés Esteban Ocon.
Respecto a la crisis de imagen que tiene Pemex entre los mexicanos por los temas de corrupción, los malos resultados económicos y los altos precios de las gasolinas, Quispe señaló que una marca que detecta falta de valores debe aliarse de otras que provean las cualidades con las que no cuenta en ese momento.
“En marketing, una crisis que está detectada implica que necesita afianzarse en valores que no tiene o que está alejada esta entidad en este momento, por lo tanto es comprensible que se busque afianzar de manera estratégica en otra marca o entidades que le den esa falta de poder llegar a la gente”, dijo.
En ese sentido, el director de CID resaltó que el deporte cuenta con una serie de valores de donde ha surgido la palabra deportivismo, entre las que destaca la honestidad y otras cualidades.
“Pemex es una marca poderosa que requiere y se va apoyar en los valores que confiere el deporte que son competitividad, juego limpio, actuar siempre bajo la legalidad, eso hace el deporte”.
GP de México, el elemento clave
El Gran Premio de México 2017 dejó ganancias por 14, 700 millones de pesos, de los cuales 56% fueron por derrama económica y 47% por valor de marca, además creció 31.7% de audiencia televisiva, según dieron a conocer los organizadores de la carrera la semana pasada.
Por ello, y con Sergio Pérez ubicado como la gran figura del deporte motor de México a nivel mundial, Pemex encuentra una gran ventana de difusión no solo en el país sino también en otros lados donde podría obtener beneficios.
“Lo que ellos quieren es acercarse a la gente, en tres años la Formula uno ha logrado las ganancias que habían proyectado para cinco años, está pegando muy fuerte, viene el boom del automovilismo mexicano, gracias a que Checo Pérez es una figura que está siendo bien aceptada.
“Aunque (el automovilismo) sea elitista tiene muchos adeptos, es una marca que está creciendo, la Fórmula Uno en México, y no importa tanto que no llegue a todo el populo, pero está llegando en los medios informativos”, señaló Héctor Quispe.