Maximiliano Guzmán Romero, ‘Max’ tenía 18 años cuando un error en sus decisiones lo llevó a la cárcel. Su sentencia de 12 años parecía que iba a devorar su juventud; sin embargo, el deporte le ayudó para reducir su pena y hoy día vive en libertad una segunda oportunidad.
‘Max’ no quiso formar parte de ese 25 por ciento de los presos que reincide, de ellos más de la mita (55.3 por ciento) regresa a la cárcel en menos de dos años, según datos de la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad.
El sistema penal en México no funciona de manera adecuada, entre sobrepoblación, corrupción y carencia de programas de readaptación, los presos lejos de lograr rehabilitarse en reclusión pierden todo valor social.
Ante esa situación, organizaciones civiles y deportivas apoyan con programas sociales para la reinserción de la población penitenciaria. Uno de estos es Ring, boxeando por la reinserción encabezado por Red de Jóvenes Viral y el Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
“Lo primero que pierde uno ahí es el autoestima, se cae por los suelos, por las humillaciones que uno sufre, por estar distante de tu familia, estar sometido, el proyecto me hizo recuperar la confianza y encontrar talento que no sabía que tenía, sí me gustaba el boxeo pero nunca lo practiqué hasta que estuve allá adentro”, relata ‘Max’.
Guzmán Romero es el primer caso de éxito del programa, ya que su participación en el boxeo le permitió salir de prisión a los 6 años y medio de condena.
El proyecto se llevó a cabo en el penal de Atlacholoaya, Morelos, donde se encuentra 2 mil 548 internos, de los cuales 30 se inscribieron en el programa, en el que recibieron entrenamiento de parte de excampeones mundiales como Humberto ‘Chiquita’ González, Isaac ‘Tortas’ Bustos, entre otros.
Eunice Rendón, directora de Viral Mx, resalta que el programa de atención psicológica integral permitió a los reclusos recuperar la confianza, así como la reducción de violencia y 23 de ellos se alejaron del consumo de drogas.
“Las exigencias que te impone el boxeo, dormirse temprano, no estar echando relajo, no estar fumando, todo ese tipo de cosas hacen que uno se haga responsable de su persona y son los breves cambios, luego con lo psicológico empiezas a ampliar tu mente, te da más confianza y autoestima”, añade Max Guzmán.
Como profesionales
Parte de la ayuda del programa fue lograr que la experiencia la vivieran como si fueran pugilistas profesionales, no solo porque además de entrenar se realizaron torneos y combates, sino por la férrea rutina física y técnica que llevaron a cabo.
“Entrenábamos del diario de 9 a 12 y de 3 a 5, terminábamos cansados, ni tiempo para pensar en otras cosas, fue una experiencia muy grata para mí, tengo mucho qué agradecer”, recuerda Guzmán Romero.
Mauricio Sulaimán, presidente del CMB, explicó que el apoyo continuará y se buscará extender este modelo a otros penales, ya que quedó sorprendido de la reacción y los resultados del programa.
“Estoy muy emocionado que el boxeo haya sido parte de este movimiento, es testimonio de que puede haber cambios positivos, tomamos el compromiso de no abandonar este penal, ya se le está dando mantenimiento, porque todos ellos creyeron en el programa”, señala Sulaimán.
Los resultados de Ring, Boxeando por la reinserción quedaron plasmados en un libro, el cual se puede descargar a través de Viral Mx, donde se detallaron los pasos de cada acción y se incluyen testimonios de algunos participantes.
Dato
El penal de Atlacholoaya tiene 2,548 internos cuando su capacidad máxima debería ser de mil 900 personas recluidas. Morelos tiene 135% de sobrepoblación en sus reclusorios.