Se asoman los gigantes

Mientras México celebra el tan esperado pase al Mundial de Brasil 2014, la Selección Nacional debe ponerse a analizar el camino que tendría a partir del próximo 12 de junio.

El panorama aún es incierto, pero hay muchas posibilidades de que en la primera fase del torneo, el Tri tenga que enfrentar al menos a dos gigantes del balompié mundial.

El próximo 6 de diciembre se llevará a cabo el sorteo en Costa do Sauípe a las 10:00 horas tiempo de México, donde los equipos cabezas de serie serán Brasil, España, Alemania, Argentina, Colombia, Bélgica, Suiza y Uruguay.

El Tricolor está ubicado en el bombo 4, junto a los equipos que se pueden identificar como débiles para el Mundial como Estados Unidos, Costa Rica, Honduras, Japón, Irán, Corea del Sur o Australia.

Esto le llevará a tener que enfrentar en la fase de grupos a un cabeza de serie del bombo 1, a un europeo del bombo 2 y a un africano o sudamericano (o incluso Francia) del bombo 3.

De acuerdo con el reglamento oficial del Mundial de Brasil 2014, los 32 equipos calificados al torneo fueron acomodados en estos cuatro bombos según su lugar en la clasificación de octubre de la FIFA, tomándose en cuenta también criterios deportivos y geográficos, ya que sólo las selecciones europeas pueden ubicarse en un mismo grupo.

En el primer bombo, el más fuerte y sin duda el rival a vencer será Brasil. 

Del segundo frasco, está Holanda, y posiblemente del tercer Bombo se asoma Francia como futuro rival. Pero todo esto se podrá conocer hasta el sorteo del día seis.

Por eso siempre fue trascendental el accionar y los resultados del Tricolor en este 2013 pensando en una buena posición en el ranking. Pero con los problemas con la dirección técnica, tanto las eliminatorias, la Copa Confederaciones, la Copa Oro y hasta el repechaje influyeron para que México esté donde este.

El abultado resultado contra Nueva Zelanda no fue sorpresa para nadie, pero de ninguna forma debe borrar el agónico accionar de los ‘ratones verdes’ o el favor que les hizo Estados Unidos cuando venció a Panamá.

Es probable que vaticinemos el futuro del equipo de Miguel Herrera (si continúa como director técnico) desde que conozcamos la letra de grupo y los rivales que le toquen. Ser el sitio 24 de la clasificación mundial de FIFA tiene sus consecuencias, que podrían costarle caro desde el inicio del certamen a celebrarse en Sudamérica.

¿Suerte de repesca?

Ser un clasificado al Mundial por la vía del repechaje suena despectivo, pero la realidad es que la estadística dice que esta condición no influye en los resultados de un equipo, e incluso uno de ellos ya llegó a una final.

Es normal que vean a México como equipo débil. En el Hexagonal Final no tuvo tanta efectividad que buscó la última oportunidad en la repesca contra Nueva Zelanda. El resultado, ya lo sabemos; el futuro, nos puede sorprender.

En el Mundial de Corea-Japón 2002, Alemania clasificó al certamen mediante la repesca europea junto a Bélgica, Eslovenia y Turquía. Los alemanes hicieron su trabajo enfocados en el éxito, al grado de avanzar fase por fase hasta llegar a la final. Se enfrentó a Brasil y para su mala suerte perdió, pero en ese momento nunca se acordó que entró por la puerta de atrás.

Otro que llegó tarde al llamado fue Uruguay en Sudáfrica 2010. En la fase inicial empató con Francia y venció a Sudáfrica y México. En los octavos dderrotó a Corea del Sur y en los cuartos a Ghana, para quedarse con la cuarta posición del mundial tras ser derrotado por Holanda.