En medio de las declaraciones de Ricardo LaVolpe, quien se defiende y revela los extraños manejos que se tienen en Chivas, se comprueba que el Rebaño Sagrado es un equipo lleno de problemas.
Cuando se debería estar hablando de refuerzos y cuestiones deportivas, uno de los equipos grandes del futbol mexicano está en boca de todos por denuncias de agresión física, y cuestiones extracancha.
¿Agresión física o venganza?
“El Caso LaVolpe” enfrenta a una directiva que apoya a Alma Belén Coronado, podóloga del equipo y quien aparentemente fue la agredida por el director técnico, y a un entrenador al que nadie le avisó de la denuncia que existía en su contra.
El caso también permite pensar en que más allá de un aparente mal comportamiento de LaVolpe, la decisión de exhibirlo públicamente y afectar no solo su carrera, sino su vida extracancha, pueda deberse al mero afán de querer perjudicarlo.
Según el entrenador, Jorge Vergara no ha vuelto a tener comunicación con él, dejando abierta la posibilidad de que este circo mediático haya sido creado para despedir a LaVolpe sin tener que pagarle un finiquito. Ante esta latente situación, los abogados del argentino ya preparan una demanda laboral, tras las acusaciones realizadas por el dueño del Guadalajara.
Lo que asegura LaVolpe
El técnico dice que por medio de mensajes de whatsapp y correos, había acordado con el presidente deportivo Juan Manuel Herrero una determinada cantidad para dirigir a Chivas.
Después de la presentación oficial y el primer entrenamiento, se le notificó que no se le pagaría lo previamente acordado. LaVolpe asegura que accedió por haber tomado el compromiso. “Me tuve que haber ido y no me fui”, dijo el técnico.
Todos parejos
Otro de los rumores que están hundiendo al Rebaño en materia futbolística y personal, es que existe un equipo dividido, ya que cuando despidieron al kinesiólogo Luis Fossatti, algunos jugadores prefirieron continuar tratándose con él y no con Rafael Ortega, jefe del departamento médico de Chivas.
¿Quién es el soplón?
Declarar que Angélica Fuentes, esposa de Vergara, recibe información de dos jugadores de Chivas, es una fuerte declaración que evidencía que las riendas del equipo las lleva ella.
LaVolpe, al enterarse de esto, habló con los jugadores en el medio de la cancha y les dijo, que si él confirmaba dichos rumores, los dos jugadores que andaban de “soplones” no se quedarían en el equipo.
La gota que derramó el vaso
LaVolpe explicó que su malestar con la podóloga del equipo, es porque realizaba masajes, algo con lo que no estaba de acuerdo, porque la función de ella era otra.
Según el técnico, al comprobar que Alma Belén Coronado, trabaja con las articulaciones, le reclamó y prohibió que continuara con ese tipo de prácticas.
“Fui a verla, comprobé que sí da masaje, vi que usaba la pomada de árnica y dije esto no lo voy a permitir, la reclamación se terminó ahí”, comentó el director técnico en la rueda de prensa a la que convocó junto con su abogado.
Para el extécnico nacional, hay cosas que están en el aire, pero apela a que la justicia se encargue de poner todo en su lugar, mientras tanto, con sus declaraciones deja en claro que aunque el del dinero es Vergara, Angélica Fuentes tiene mucha injerencia..
Toda esta novela, o “quilombo”, como lo definió LaVolpe, confirma que la crisis en Chivas es gracias a los rumores y divisiones que están hundiendo más al equipo, tanto así que el siguiente torneo enfrentarán problemas de descenso.