No estaba de más ir a “saludar” a los altos mandos del arbitraje previo al arranque de la Liguilla.
Por ello, Luis Miguel Salvador no solo habría acudido a las oficinas de la Federación Mexicana de Futbol para acordar los horarios de la Liguilla para el superlíder Monterrey, sino también para tratar otros asuntos.
El presidente de Rayados se habría dado una vuelta por la Comisión de Arbitraje para sugerir que en las finales, a los albiazules no se les pusiera como árbitro a César Arturo Ramos.
Aparentemente el directivo rayado no estaría conforme con el trabajo del silbante, quien en el duelo contra Atlas, habría perdonado una expulsión al delantero francés André Gignac, quien en aquel duelo que se jugó en el Universitario, le reclamó fuertemente al colegiado.
En esta visita a la capital del país, Salvador habría confirmado los horarios para la Liguilla, apoyando a Tigres en su propuesta de jugar a las 19:00 horas, aunque Morelia estuvo muy cerca de obligarlo a cambiar de horario, ya que los purépechas querían jugar a las 20:30 de mañana miércoles.