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Adquisiciones: ¿competencia o monopolio?

Cuando un gran jugador adquiere a una empresa de menor tamaño no siempre significa que ocurrirá una gran concentración, ya que puede suceder lo contrario al incentivarse el crecimiento de un mercado

“Las concentraciones obedecen a las estrategias de las empresas”
Javier NúñezExcomisionado de Cofece

¿Te ha pasado que cuando compras ciertos productos que creías que pertenecían a empresas diferentes al leer la etiqueta te das cuenta que, pese a tener nombre distinto, pertenecen al mismo grupo?

Todos los días, millones de mexicanos consumen bienes que son propiedad de un puñado de empresas, situación que da pie a analizar si en realidad existe competencia económica en el país.

Hace años, las compañías con operaciones en el país mantuvieron la tendencia de adquirir a otras del mismo mercado, pero no siempre ocurre que las negociaciones den paso a la creación de un monopolio, a pesar de que la corporación adquirida sea menor.

“Una firma grande puede comprar a una pequeña sin que sean competidores. Cuando esto ocurre es porque la mayor tiene interés en otros negocios”, dice Javier Núñez, excomisionado de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) en entrevista con Reporte Índigo.

Las adquisiciones no dejarán de ocurrir, ya que son parte de la dinámica del ecosistema del mundo de los negocios. Algunas organizaciones compran para crecer y otras venden porque sus prioridades son diferentes

Para Fernando Tapia, director de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey, campus Toluca, estos acuerdos también son impulsados cuando una compañía detecta una amenaza o una oportunidad. Asimismo, el académico asegura que las transacciones ya no se generan por sectores como sucedía en años atrás.

“Con los nuevos modelos de negocio que rompen barreras, esta tendencia será mayor”, opina el experto.

De Nestlé a Walmart

México es un mercado activo en las negociaciones de las compañías. La más reciente fue el 13 de septiembre cuando Walmart hizo público el acuerdo para adquirir las operaciones de Cornershop, una tienda en línea de entrega de pedidos de supermercados a domicilio, por un monto que superó los 225 millones de dólares. Esta compra va orientada hacia la transformación digital, de acuerdo con Tapia, del Tec de Monterrey, pues las compañías que basan su operación en la tecnología ayudan a avanzar a los grandes jugadores, que son más lentos en estos temas. En este sentido, la consultora Deloitte estima que las compras de empresas del sector tecnológico reinarán a lo largo de este año.

“La adquisición de tecnología es la nueva prioridad y el principal conductor en las actividades de fusiones y adquisiciones”, se lee en el análisis Tendencias de Fusiones y Adquisiciones 2018

El cierre del acuerdo entre la cadena minorista y la startup aún está sujeto a la aprobación reglamentaria , pero se espera se concrete a fin de año.

Esta no es la primera operación que el regulador debe evaluar para determinar si hay alertas. En el pasado, la comisón analizó arreglos como el de Nestlé, que adquirió el negocio de Nutrición de Pfizer por 11 mil 850 millones de dólares en abril de 2013. Otro de los casos más relevantes fue cuando la cadena de tiendas minoristas Soriana absorbió algunas operaciones de Comercial Mexicana por 39 mil 193 millones de pesos tras recibir aval en octubre de 2015.

“El espíritu de las fusiones en casos como el de Soriana es maximizar y aprovechar centros logísticos, negociaciones con proveedores y eficientar procesos”, comenta Fernando Tapia. En México, la Cofece por ley prohíbe las operaciones que otorguen al jugador principal el poder de interferir en la oferta y la demanda de productos, establecer precios einhibir la entrada de competidores. En lo que va de este año, la comisión analizó 131 negociaciones, de las que autorizó 128, aprobó una con condiciones y desestimó dos. El valor de estas transacciones es de 7.8 billones de pesos, 2.1 billones son de alcance nacional y 5.7 billones internacionales.

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concentraciones analizó Cofece durante el año pasado

“El papel de Cofece ha sido fundamental, ya que una fusión no necesariamente lleva a prácticas monopólicas. El regulador pone en duda algunas adquisiciones y obliga a algunas empresas a escindir operaciones para que sean más eficientes”, añade Tapia.

Corrupción, ¿amigo cercano?

La corrupción es uno de los grandes pendientes en este país. Incluso se dice que es uno de los factores que impiden la llegada de nuevos jugadores al país. Contrario a esta creencia, Núñez, ex comisionado de la Cofece, considera que esto no abona a cometer más actos ilegales.

“La falta de competencia resulta de las actividades privadas y no tiene que ver con la corrupción. Lo cierto es que cuando falla la competencia, sobre todo, en momentos de adquisiciones públicas, sí se genera una situación por la que se concentran los mercados”, expresa.

El también asesor privado añade que en ocasiones son los organismos encargados de las licitaciones quienes de manera inconsciente restringen la competencia, aunque esto no siempre ocurre.

2.7
billones de pesos fue el valor de operaciones en 2017

Por su parte, Fernando Tapia, director de la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey, campus Toluca, explica que no se puede cerrar los ojos ante la corrupción, ya que es un riesgo que las empresas evalúan al realizar la compra de otro negocio, aunque tampoco inhibe las transacciones.

“México es un mercado en expansión, prueba de ello es que el año pasado hubo un repunte importante en fusiones y adquisiciones. El entorno comercial en el país es y seguirá siendo muy atractivo a nivel internacional”.

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