Inteligente financiero
Además de cocinar exquisita cocina, se le ha atribuido al chef francés un excelente manejo gerencial. Como cualquier financiero preocupado por su dinero, el chef buscó una estrategia alterna para pagar menos impuestos, optando por convertirse en ciudadano de Mónaco, el pequeño país en la costa azul de Francia.
Valiente en el cielo
Desde corta edad y hasta estos días, Alain ha tenido un contacto peculiar con los aviones, a los que adora y respeta. En 1984 se desplomó el avión Learjet en el cual viajaba, siendo el único sobreviviente abordo. Lo que sería suficiente para mantener en la tierra a muchos no lo fue para el chef francés, quien actualmente viaja 300 días al año para supervisar sus 18 restaurantes en siete países.
Simple elegancia
Los largos viajes que Alain se da también sirven para otro propósito más sutil que ser gerente: obtener ideas de decoración y cocina para nuevas aventuras. Desde la decoración hasta el menú se cambian constantemente en sus restaurantes para acomodar las nuevas modas o descubrimientos gastronómicos alrededor del mundo. Ducasse describe al proceso como elegante, pero simple.
Su constelación
Cuando tenía 33 años, Ducasse rompió el récord de ser el chef más joven en ganar tres estrellas Michelin, el máximo galardón en la industria restaurantera. Luego deslumbró al administr simultáneamente tres diferentes restaurantes de tres estrellas en París, Monte Carlo y Nueva York, convirtiéndolo en uno de los más reconocidos chefs en el mundo. Ya acumula 16 de estas estrellas.
Forja escuela
Las ambiciones de Ducasse no se limitan a la cocina. A través de los años, el chef se ha interesado por manejar una “línea editorial” tanto en sus restaurantes como en sus múltiples libros sobre cocina y opinión que publica. Alain además fundó una escuela, bajo la idea de que tiene una responsabilidad por entrenar a la nueva camada de chefs del siglo 21.