El ascenso de Amazon
Jeff Bezos desplazó a Warren Buffet (Berkshire Hathaway) y a Amancio Ortega (Inditex, Zara) en el índice de multimillonarios de Bloomberg, convirtiéndose en el segundo hombre más rico del mundo. Su fortuna está valuada en 75.6 mil millones de dólares.
Rodrigo Carbajal
Jeff Bezos desplazó a Warren Buffet (Berkshire Hathaway) y a Amancio Ortega (Inditex, Zara) en el índice de multimillonarios de Bloomberg, convirtiéndose en el segundo hombre más rico del mundo. Su fortuna está valuada en 75.6 mil millones de dólares.
El ascenso de Bezos, el fundador y director general de Amazon, no es una eventualidad coyuntural. Bezos no recibió una concesión gubernamental ni se ha beneficiado de fenómenos de mercado específicos como el auge del petróleo shale en Estados Unidos, que ha añadido a sus pioneros (Harold Hamm, de Continental Resources, por ejemplo) a la lista de multimillonarios de Bloomberg.
Más bien, el sitio de Bezos en este índice responde a un avance y a una evolución consistente de Amazon, una firma que se basa en los principios de negocio que prometen regir a la economía del siglo XXI.
La característica primordial de Amazon es que ha sacrificado las ganancias de la compañía para expandir su participación de mercado y hacer crecer los ingresos de la firma de manera exponencial. En el 2016, la compañía registró ventas anuales de más de 136 mil millones de dólares, 12 veces más que los ingresos que percibía Amazon hace una década.
A pesar de que la firma ha llegado a presentar una utilidad anual neta negativa, como sucedió en 2014 y 2012, el mercado ha depositado su confianza en el plan de negocios de Amazon. El valor de mercado de la compañía es de 409 mil millones de dólares, casi equiparable al valor de mercado de Facebook.
De acuerdo a Ross Sandler, analista de Bank of America Merrill Lynch, Amazon será una de las primeras empresas en alcanzar una valuación de un billón de dólares. El potencial de la compañía yace en que, a diferencia de las cadenas minoristas tradicionales, el número de consumidores que compran a través de internet ha crecido consistentemente.
Monopolizar y subsidiar
Jeff Bezos ha seguido la máxima de Silicon Valley que, de acuerdo al inversionista Peter Thiel, dicta que el objetivo primordial de una compañía tecnológica es convertirse en un monopolio.
Google, Facebook y Amazon, tres de los mayores jugadores del sector tecnológico, comparten una estrategia común. Todas estas compañías se enfocaron en consolidar su posición dominante en su negocio central para después subsidiar otros proyectos.
Amazon, el minorista electrónico más grande del mundo, ha incursionado en diferentes campos como el desarrollo de tecnología de manejo autónomo, la producción de contenido de entretenimiento y el servicio de nube informática.
El departamento de investigación y desarrollo de Amazon ha generado réditos significativos. De acuerdo a una estimación de Deutsche Bank, el negocio de nube informática de Amazon está valuado en 160 mil millones de dólares.
Amazon intenta disputarle a Netflix el liderazgo del incipiente mercado de entretenimiento en video a través de streaming. Sin embargo, más allá de la lógica estratégica del lanzamiento del servicio Amazon Prime Video, este negocio ha abierto la puerta a que la influencia política y mediática de Jeff Bezos siga creciendo.
El fundador de Amazon se ha convertido en una presencia regular en Washington y en Hollywood, en donde las películas producidas por la compañía obtuvieron seis nominaciones a los Premios de la Academia. Además, en el 2013, Bezos pagó 250 millones de dólares para obtener el control del Washington Post, uno de los tres diarios más influyentes de Estados Unidos.
Amazon vs. Wal-Mart
El ascenso de Amazon ha llegado a tal grado que Wal-Mart, la mayor cadena minorista en el mundo, la considera como su mayor amenaza existencial.
En el 2016, Wal-Mart pagó 3.3 mil millones de dólares por Jet.com, una firma de comercio electrónico que podría ayudar a la compañía de Arkansas a mejorar su plataforma de internet y su sistema de datos.
El monto de la operación supera en más de cuatro veces lo que gastó Amazon en fusiones y adquisiciones en los últimos dos años.
El consenso de analistas coincide en que hay dos elementos cruciales en el negocio minorista: la administración de información y de datos y el desarrollo de cadenas de suministro competitivas. Amazon tiene una amplia ventaja en el primero, mientras que Wal-Mart cuenta con una ligera ventaja en el segundo.
La pregunta relevante para determinar quién se convertirá en el jugador dominante del mercado minorista del siglo es qué pasará primero: ¿Amazon consolidará su cadena de distribución o Wal-Mart mejorará sus capacidades digitales?