Recortes al presupuesto en ciencia y cultura afectarán a jóvenes
Los recortes al presupuesto de ciencia y cultura afectan a toda la sociedad mexicana, pero en mayor medida a los jóvenes, quienes cada día se exponen a los altos índices de violencia por la falta de valores que se inculcan en estas áreas
Viviana BranLa cultura y la tecnología son dos valores intangibles que contribuyen al desarrollo humano y al impulso de la creatividad, sin embargo, desde hace años el gobierno mexicano los ha dejado relegados al recortarles presupuesto y darle prioridad a otros sectores.
Diversos sociólogos coinciden en que los diferentes tipos de violencia que aquejan a la sociedad podrían combatirse a través de la cultura y la tecnología, ya que se vislumbran como herramientas capaces de impulsar el cambio social a través del fomento de valores, respeto, convivencia y el ejercicio de los derechos humanos.
La ola de inseguridad no es reciente, viene arrastrándose desde hace años. La agenda política actual ha priorizado los temas relacionados a la corrupción, el sector energético, la pobreza y la crisis migratoria, y aunque son cruciales para el desarrollo del país, el arte y la ciencia podrían propiciar un cambio en el comportamiento de las nuevas generaciones.
En 2018, el nivel de paz del país se deterioró 4.9 por ciento. Esto quiere decir que el número de homicidios aumentó 14 por ciento, superando las 27 muertes por cada 100 mil personas.
Además, el impacto económico que genera la violencia se elevó 10 por ciento también en ese año, alcanzando 5.16 billones de pesos, que equivale a 24 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Samuel Torres Méndez, director de investigación en el Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve), asegura que la ciencia y la cultura son, en lo absoluto, imprescindibles para disminuir la violencia, ya que el actual resquebrajamiento del tejido social en los jóvenes, adultos mayores y niños se debe a que ya no conectan entre si y no producen el diálogo intergeneracional que consolidaba a las sociedades.
“Es muy importante llevar el derecho a la ciencia y la cultura a todas las personas en el territorio nacional, pero particularmente a los jóvenes, no solo porque son un derecho que enaltece la condición humana, sino porque son un sustrato indispensable para fortalecer el tejido social que ya ha sido bastante dañado por la desigualdad, la exclusión y la violencia en el país”, detalla Torres Méndez.
Los hechos de los recortes al presupuesto
La primera confrontación entre el gobierno y la industria cultural se suscitó cuando se dio a conocer el Presupuesto de Egresos para el 2019. El proyecto planteaba una reducción de mil millones de pesos en comparación con la asignación al ejercicio fiscal de 2018.
Tras una serie de manifestaciones encabezadas por representantes de la comunidad artística se llegó a un acuerdo para incrementar el presupuesto para este año, que llegó así a los 12 mil 894 millones de pesos.
Las políticas de austeridad implementadas, hasta el momento, han afectado a las dependencias culturales como el Fonca, la Biblioteca Vasconcelos, el INAH, el INBA, entre otros.
Por otro lado, los recursos para la ciencia y la tecnología se redujeron 13.6 por ciento, al quedar en 49 mil 733 millones de pesos para 2019.
Varios institutos de investigación y centros de estudios superiores, así como universidades, podrían verse afectadadas por la asignación de este presupuesto
Samuel Torres comenta que hace falta mucho por hacer, y a pesar del presupuesto actual, la paciencia será crucial para determinar los avances reales.