Dicho y hecho
El Banco de México hiló cinco alzas consecutivas en su tasa de interés de referencia, al decidir ayer un incremento de 25 puntos base, a 6.50 por ciento; lo que analistas vieron como la confianza de la autoridad monetaria de que la inflación regresará a su meta.
El diferencial respecto a la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal de Estados Unidos llegó a un nivel que no se había visto desde el 2009.
Lourdes Bautista
El Banco de México hiló cinco alzas consecutivas en su tasa de interés de referencia, al decidir ayer un incremento de 25 puntos base, a 6.50 por ciento; lo que analistas vieron como la confianza de la autoridad monetaria de que la inflación regresará a su meta.
El diferencial respecto a la tasa de interés de referencia de la Reserva Federal de Estados Unidos llegó a un nivel que no se había visto desde el 2009.
Al respecto, Valeria Moy, directora de ‘México, ¿Cómo Vamos?’, señaló en entrevista para Reporte Índigo que el incremento en las tasas de interés se daba por anticipado, tomando en cuenta que el único mandato del banco central es procurar la estabilidad de precios.
Indicó que la intención del Banco de México es mantener el poder adquisitivo de la moneda, y la única forma de hacer esto es mediante el control de la inflación, que ha registrado niveles altos, al subir en la primera quincena de marzo a un nivel interanual de 5.29 por ciento.
Valeria Moy destacó que el ritmo de incremento de las tasas de interés podría moderarse, en función de que la inflación regrese a la meta del instituto central.
El consenso de analistas considera que el efecto de esta política monetaria tarda entre seis meses y un año en reflejarse en la economía real.
Compromiso con la inflación
Valeria Moy, profesora de economía en el ITAM, aseguró que la decisión del Banco de México representa una señal muy clara del compromiso de controlar la inflación y hacer que regrese a su rango.
También manifestó que, pese a la vinculación de México con Estados Unidos, el banco central es autónomo y responde solamente por la inflación de México.
En ese sentido, si el aumento de precios en el país se sale de control, ya sea por razones internas o ajenas, el compromiso de la autoridad monetaria mexicana es subir la tasa, al margen de la decisión de la Reserva Federal.
“Nosotros tenemos que responder a nuestras cuestiones internas, y al mismo tiempo estar atentos a las externas”, añadió.
Sin embargo, ante un alza de tasas de interés en EU, el Banco de México tendrá que reaccionar, aunque no necesariamente en la misma magnitud ni al mismo tiempo, pero sí muy pronto, dijo.
“Ambas tasas están subiendo (en México y Estados Unidos), aunque nuestra inflación se está incrementando y ése es el objetivo primordial para subir tasas del Banco de México”, declaró.
La analista afirmó que la decisión del instituto central mexicano refleja que existe confianza de que la inflación regresará al rango objetivo.
“Esto de alguna forma da tranquilidad, no vemos una espiral inflacionaria, hay un brinco que se va a poder contener, creo que eso va a pasar”, sostuvo.
Por otro lado, el Banco de México destacó que es importante tener finanzas públicas sanas para mantener la economía en buen estado.
“Eso es importante porque manda una señal a los demás agentes económicos, de ojo con las finanzas públicas, a pesar de no ser chamba de Banco de México”, reveló.