Para sobrevivir al cierre de sus negocios durante los periodos de confinamiento, dueños de micro y pequeñas empresas tuvieron que dar un salto digital hacia las herramientas y estrategias de comercio electrónico. La integración de los negocios al e-commerce es hoy un elemento indispensable para su crecimiento, Canasta Rosa identificó esta necesidad antes de la pandemia.
Sin embargo, la evolución digital de sus negocios no ha resultado ser un proceso sencillo para los dueños de miles de empresas, sobre todo si se toma en cuenta que en México menos del 70 por ciento de los adultos acceden a internet, de acuerdo con datos del Digital Economy Outlook 2020, elaborado por la OCDE.
316 mil
“En Latinoamérica con la pandemia muchos vendedores tuvieron que usar su celular, particularmente herramientas como Whatsapp para poder comunicarse con sus clientes, sino encontraban la plataforma correcta ellos tenían que mandar los pedidos de forma manual y ellos mismos entregar los productos”, relata Deborah Dana CEO, de Canasta Rosa, la plataforma de venta en línea para emprendedores mexicanos más popular del país.
Ante este panorama, alternativas como este marketplace (plataforma en donde las tiendas o negocios pueden ofrecer sus productos en línea) fueron una de las principales herramientas a las que recurrieron los emprendedores y los datos de su crecimiento exponencial lo demuestran. En abril de 2020, Canasta Rosa pasó de tener cuatro mil negocios en su plataforma a 18 mil, detalla su fundadora en entrevista con Reporte Índigo.
“Entre los diferenciadores de nuestra plataforma están que no pedimos requisitos fiscales o legales complicados, si la gente no tiene RFC nosotros mismos les retenemos sus impuestos y los pagamos por ellos, tenemos un aliado que les hace su cuenta de banco en cinco minutos desde su celular para que puedan recibir los pagos de sus ventas y además damos flexibilidad a que puedan tener productos en inventario o hechos a la medida y así pueden hacer inventarios conforme les van a llegar sus ventas, eso les ayuda a no hacer inventarios grandes”.
Este sistema permite que los comerciantes y emprendedores mexicanos se enfoquen en la creación y calidad de sus productos.
Canasta Rosa nació en 2017 y originalmente estaba enfocada en apoyar a emprendedoras mexicanas que buscaban comercializar sus productos a través de espacios digitales, sin embargo, el mercado era muy amplio y las necesidades de los pequeños empresarios muchas, por lo que finalmente se terminó expandiendo a todos los emprendedores mexicanos interesados.
“Faltaba una plataforma que les facilitara el camino para hacer crecer sus ventas y llegar a muchos compradores en diferentes regiones, no sólo donde estaban ellas, el mercado que queríamos abarcar era enorme”, explica Dana, quien previo a la creación de esta plataforma dirigió el fondo de capital privado Soldiers Field Angels y cofundó Kiwilimon, el portal de recetas de cocina más visitado de Latinoamérica.
En México somos alrededor de 30 mujeres emprendedoras en negocios digitales y en Latinoamérica 200. Estamos viviendo un gran cambio en acceso al financiamiento para estas empresas
El año en que la pandemia por COVID-19 obligó a miles de negocios a bajar sus cortinillas el comercio electrónico reportó un crecimiento de 81 por ciento comparado con el 2019, generó una derrama económica por 316 mil millones de pesos y acaparó un nueve por ciento del mercado total del retail.
Huella digital firme de Canasta Rosa
El crecimiento exponencial del comercio electrónico en el país ha empujado la propia evolución de Canasta Rosa, la integración de nuevos productos y hasta nuevos aliados comerciales, entre ellos una alianza con el gigante del ecommerce, Amazon.
A través de esta colaboración, la empresa dirigida por Dana apoyará a los productos que quieran estar en Amazon y cumplan con los requisitos para integrarse a la plataforma y comercializarse en este espacio.
“Entendemos y aceptamos que cada plataforma tiene sus compradores y el tener que obligar a los emprendedores a sólo comercializarse a través de Canasta Rosa los estamos limitando, por eso ahora vamos a ser un integrador”, explica.
Esta estrategia de diversificar los espacios digitales y físicos de un negocio para llegar a sus clientes, es precisamente una de las máximas de Dana para hacer crecer una empresa.
“Tengan una estrategia digital, hay tres vías diferentes para tenerla: marketplaces, página web o con otros jugadores que venden en línea. No olviden la parte física, porque la gente ya quiere salir, hacer compras en físico, estar en contacto con otras personas y viene muy fuerte este año. Y por último, no dejen de estar en contacto con sus clientes, al final ese es el secreto de Canasta Rosa, entendemos las necesidades de nuestros clientes y actuamos en consecuencia”, recomienda la empresaria.
