China ajusta sus motores
Para la economía china, las cosas empiezan a mejorar.
Después de meses de especulación por parte de analistas alrededor del mundo sobre si China lograría su objetivo de crecimiento de 7.5 por ciento, la información económica más reciente parece indicar que la meta oficial será lograda.
Datos de la Oficina Nacional de Estadísticas de China muestran que durante el tercer trimestre de este año, el crecimiento anualizado en China fue de 7.8 por ciento.
Rolando Hinojosahttp://www.youtube.com/watch?v=UJUcR1VsERY
Para la economía china, las cosas empiezan a mejorar.
Después de meses de especulación por parte de analistas alrededor del mundo sobre si China lograría su objetivo de crecimiento de 7.5 por ciento, la información económica más reciente parece indicar que la meta oficial será lograda.
Datos de la Oficina Nacional de Estadísticas de China muestran que durante el tercer trimestre de este año, el crecimiento anualizado en China fue de 7.8 por ciento.
Con esta cifra, mayor que el 7.5 por ciento registrado en el segundo trimestre, es muy probable que el crecimiento durante el 2013 cumpla con los objetivos del gobierno chino.
En parte, el mayor crecimiento en el tercer trimestre se vio impulsado por un aumento considerable en las ventas de automóviles.
Tan solo en septiembre se vendieron 1.9 millones de vehículos, un incremento anualizado de 20 por ciento.
Los vendedores asociaron esto con el mayor nivel de consumo que se da gracias a una celebración nacional que tiene lugar durante el mes.
Dentro del indicador de ventas, la parte correspondiente a automóviles comunes aumentó en un 21 por ciento, mientras que las ventas de autobuses y camiones se incrementaron en un 13 por ciento.
El mayor nivel de ventas ha beneficiado el precio de las acciones de las compañías que se dedican a la producción de vehículos o de partes para los mismos, incluyendo las subsidiarias chinas de Volkswagen y Peugeot, y empresas domésticas como Changan y Great Wall.
A pesar de esto, el desempeño de la producción industrial china ha decepcionado en los últimos meses.
Durante los primeros nueve meses del 2013, el crecimiento en este sector fue de 9.5 por ciento, una cifra alta, pero menor que el 11.1 por ciento registrado en el mismo periodo del 2012.
Aunque el crecimiento estará en línea con los objetivos gubernamentales, si se le compara con los niveles de expansión que la economía china ha vivido en los últimos ocho años, el 2013 puede percibirse como decepcionante.
Como referencia, durante el 2007 China tuvo un crecimiento anualizado de 14.2 por ciento. El contexto de este desempeño mixto es un país que se encuentra buscando rebalancear su economía, dejando atrás los altísimos, pero volátiles niveles de crecimiento basados principalmente en la inversion, para alcanzar niveles estables y sostenibles de crecimiento basado en el consumo doméstico.
Desaceleran al dragón
En su más reciente reporte sobre la economía global, el Fondo Monetario Internacional (FMI) indicó que concuerda con las estimaciones de crecimiento para este año de las autoridades chinas y que prevé un crecimiento de 7.25 por ciento para el 2014.
Hablando acerca del desaceleramiento económico en el país, el FMI explicó que las autoridades chinas han evitado estimular más el crecimiento para mantenerse consistentes con sus objetivos de asegurar la estabilidad financiera y transitar su economía hacia un camino de crecimiento más balanceado y sostenible.
Pero el FMI advierte que aún se necesitan más reformas financieras para salvaguardar la estabilidad, mejorar la distribución del crédito, y guiar a la economía hacia el crecimiento sostenible.
Además, la institución apunta que fortalecer la gestión, transparencia y marco gubernamental de las finanzas públicas de los gobiernos locales de China ayudaría a contener los riesgos de la carga de deuda cada vez mayor que estos representan.
Reforma política
De acuerdo con uno de los más famosos economistas chinos, Wu Jinglian, el país asiático debe concentrarse en establecer las reformas políticas pendientes para seguir creciendo.
Desde 1978 China ha implementado de forma constante reformas que han transformado a la sociedad china.
Sin embargo, debido al constante crecimiento económico durante los últimos 10 años, las autoridades han decidido poner en pausa los cambios en el gobierno.
Lo anterior, afirma Wu Jinglian, es la raíz de los problemas económicos que afligen al país. La incapacidad de concretar las reformas políticas ha creado un gobierno invasivo y corrupto que es una fuente de riqueza para muchos burócratas.
El problema es que los encargados de solucionar los problemas son los mismos que se benefician de la situación actual.
Las condiciones actuales han convertido a China en una potencia que depende de la extracción y adquisición de recursos naturales en lugar del consumo.
De acuerdo con Wu Jinglian, la reforma política no es sólo conveniente, sino necesaria si se espera que el país continúe con su crecimiento económico sostenido.
Entre sus propuestas destacan las iniciativas para reducir la participación de empresas públicas en sectores industriales estratégicos, y la creación de tribunales independientes que conllevan la redacción de una nueva constitución con una declaración de derechos humanos.
Esto último también propiciaría la creación de un espacio libre para los medios de comunicación, que frenaría el crecimiento del Partido Comunista.