El Gobierno de China decidió imponer 25 por ciento de aranceles extra a las importaciones de productos estadounidenses valorados en 16 mil millones de dólares.
Las tasas, implementadas por una de las mayores economías mundiales, se aplicarán en automóviles, combustibles y equipos médicos a partir del 23 de agosto, mismo día en el que Estados Unidos comenzará a cobrar el 25 por ciento a artículos chinos valorados en la misma cantidad.
Aunque China ya contaba con una lista de los productos a los que les sería agregado el impuesto, en esta ocasión se señaló que la cifra de productos aumentó a 333. En junio tenía planeado imponer los aranceles sólo a 114.
La medida de Estados Unidos por implementar aranceles al país asiático fue señalada como la represalia más reciente del presidente Donald Trump para intentar que Pekín negocie concesiones comerciales, luego de que Washington impuso aranceles con un valor de 34 mil millones de dólares a productos chinos el mes pasado.
Este martes la administración estadounidense publicó una lista final de 279 productos que serán afectados por las nuevas represalias. En la lista norteamericana aparecen desde motocicletas hasta turbinas de vapor y vagones de ferrocarril
De acuerdo con el representante comercial norteamericano, Robert Lighthizer, el aumento de aranceles tiene la intención de darle a la administración de Trump opciones adicionales para alentar a China a cambiar sus políticas y “conductas perjudiciales”.
El gigante asiático ha considerado en repetidas ocasiones que las subidas tarifarias como una violación de las normas de la Organización Mundial del Comercio.
La disputa comenzó después de que Washington impuso aranceles al acero y al aluminio.
