Conspiración en Silicon Valley
Las grandes firmas de Silicon Valley están enfrentando acusaciones de conspiración para mantener bajos los salarios de sus empleados.
El caso atañe a los gigantes de la tecnología Apple, Google, Intel y Adobe, entre otros.
Un grupo de 64 mil empleados emprendió una demanda civil que busca una compensación total de alrededor de 3 mil millones de dólares.
Los demandantes alegan que los altos directivos de las corporaciones tecnológicas llevan a cabo acuerdos entre empresas para no contratar empleados entre sí.
Rodrigo CarbajalLas grandes firmas de Silicon Valley están enfrentando acusaciones de conspiración para mantener bajos los salarios de sus empleados.
El caso atañe a los gigantes de la tecnología Apple, Google, Intel y Adobe, entre otros.
Un grupo de 64 mil empleados emprendió una demanda civil que busca una compensación total de alrededor de 3 mil millones de dólares.
Los demandantes alegan que los altos directivos de las corporaciones tecnológicas llevan a cabo acuerdos entre empresas para no contratar empleados entre sí.
Según documentos judiciales del dominio público, la colusión entre las firmas tuvo su origen en lo más alto de la jerarquía organizacional de Apple y Google.
En febrero del 2005, Steve Jobs, CEO de Apple en ese momento, envío un correo electrónico a su homólogo de Google advirtiendo que el hecho de contratar gente de Apple significaría “ir a la guerra.”
Las firmas tecnológicas compiten fuertemente por la adquisición de talento, por lo que esta naturaleza competitiva de la industria se ve reflejada en un constante incremento de los salarios de los empleados de Silicon Valley.
Comparten datos salariales
Desde la perspectiva de los demandantes, lo que inició como un acuerdo tácito entre dos empresas se ha convertido en una práctica usual que abarca toda la industria.
Documentos del dominio público liberados por autoridades judiciales sugieren que los ejecutivos de las firmas de Silicon Valley se han consultado entre sí antes de realizar contrataciones cruzadas.
Asimismo, refieren la existencia de listas de empresas donde los reclutadores no pueden buscar talento, así como evidencia de que se han compartido bases de datos salariales con fines de colusión.
El caso tiene como precedente una investigación que realizó el Departamento de Justicia de Estados Unidos en el 2010.
Las firmas involucradas llegaron a un acuerdo con las autoridades judiciales, comprometiéndose a eliminar limitaciones en sus políticas de reclutamiento y contratación, perp en ningún momento aceptaron que sus acciones fueran incorrectas.
La negativa de Facebook
La dinámica de la industria tecnológica cambió a partir de que Facebook emergiera como un protagonista de Silicon Valley.
Según documentos judiciales, esto representó una preocupación explícita para los altos directivos de Google, quienes buscaron un acuerdo de no contratación con Facebook. La empresa de Mark Zuckerberg se negó respondiendo que continuaría con sus prácticas de reclutamiento de talento de ejecutivos de la industria, incluyendo a Google.