Crudo sigue cayendo

Después de una ligera recuperación en los últimos dos meses, los precios petroleros de nuevo están descendiendo, reaccionando ante sentimientos bajistas reavivados en los mercados.

El contrato de futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia en Estados Unidos, tocaron los 42.85 dólares por barril ayer por la mañana en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Esto representó su cotización intradía más baja desde marzo del 2009.

Rolando Hinojosa Rolando Hinojosa Publicado el
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El contrato de futuros del WTI llegó ayer a los 42.85 dólares por barril, su cotización más baja desde marzo

Después de una ligera recuperación en los últimos dos meses, los precios petroleros de nuevo están descendiendo, reaccionando ante sentimientos bajistas reavivados en los mercados.

El contrato de futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia en Estados Unidos, tocaron los 42.85 dólares por barril ayer por la mañana en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Esto representó su cotización intradía más baja desde marzo del 2009.

El WTI ya suma cinco jornadas de pérdidas, con una caída de casi 14 por ciento durante este periodo. Desde los picos intradía vistos a inicios de febrero hasta su nivel actual, el WTI ha descendido casi 21 por ciento.

Y el petróleo estadounidense no está solo, ya que también el crudo Brent, de referencia internacional, está bajando nuevamente. En la bolsa ICE Futures Europe, el precio de su contrato de futuros tocó los 52.58 dólares por barril, lo cual representa una caída de casi 15 por ciento desde los niveles vistos a mediados de febrero.

Siguiendo ambos referentes, la Mezcla Mexicana también parece eliminar la recuperación que había logrado, con una caída de casi 7 por ciento de inicios de febrero a la semana pasada.

Revancha bajista

El desempeño decepcionante del petróleo en la última semana ha apagado las esperanzas de que los precios hubiesen tocado fondo (después de un desplome de casi 60 por ciento desde sus niveles de junio del año pasado) y una recuperación estuviese en puerta.

La ligera alza vista a partir de finales de enero se debió a los fuertes recortes en actividad de explotación en Estados Unidos y en los presupuestos de las mayores petroleras alrededor del mundo, los cuales fueron vistos como señales de que la producción petrolera caería y los precios se moverían en dirección contraria.

Sin embargo, la producción ha mantenido su ritmo al mismo tiempo que reportes muestran una acumulación de inventarios cada vez mayor en Estados Unidos. 

Agregando aún más presión bajista, se teme que el avance en las negociaciones diplomáticas entre Irán y Estados Unidos lleve a una eliminación parcial de las sanciones económicas impuestas a este país, permitiéndole exportar su petróleo e inundando un mercado que de por sí se enfrenta a una demanda débil y una oferta rebosante.

Con esta revancha bajista, los mercados ahora se preguntan dónde tocará fondo el crudo y si superará el piso de 42.51 dólares por barril visto en marzo del 2009, en plena crisis económica.

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