El presidente Donald Trump se subió al tanque de guerra. Tras haber ganado la batalla en su juicio político colocó en el punto de mira la solicitud de presupuesto para el año fiscal 2021. Si se reelige y aprueban el plan cuyos recursos contemplados ascienden a 4.8 billones de dólares, el inquilino de la Casa Blanca pasará tijera a programas de seguridad social y ayuda al exterior. Por el contrario, realizará desembolsos históricos para la defensa y los veteranos.
Stephanie Henaro, integrante del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi), considera que la solicitud de presupuesto para la defensa incluye una dedicatoria para sus principales rivales: China y Rusia, aunque no se puede descartar a México.
“El presupuesto debe ser entendido como un manifiesto político que le habla a sus bases. Al enfocarse más en el sector militar les está diciendo que no va a permitir que nadie los invada o los intimide”, explica la internacionalista.
En el documento titulado Un presupuesto para el futuro de Estados Unidos se propone un incremento del 20 por ciento a los recursos destinados al Departamento de Defensa, para situarse en 705 mil millones de dólares.
Sin embargo, al sumar los recursos solicitados para el Pentágono, las operaciones de contingencia en el extranjero y el programa de armas nucleares, el monto supera los 740 mil millones de dólares solo para la defensa nacional.
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El Departamento de Asuntos de los Veteranos también experimentará un impulso, ya que se desea un alza de 14 por ciento en el gasto discrecional por alrededor de 105 mil millones de dólares.
Además, en el presupuesto se solicitan más de 94 mil millones por adelantado en asignaciones para programas de atención médica de los veteranos en el año 2022, con el objetivo de que se garantice que el Departamento tenga recursos suficientes para continuar brindando los servicios médicos de calidad que los retirados de la guerra se han ganado.
En caso de que la solicitud del mandatario republicano sea aprobada, el Departamento de Asuntos de los Veteranos se convertiría en el segundo más grande por gastos discrecionales, por detrás del Departamento de Defensa, que cuenta con casi seis veces el nivel propuesto por los veteranos.
El académico de la Universidad Modelo Juan Pablo Galicia considera que al momento de asignar recursos es cuando se conocen los intereses reales de un gobierno.
“El presupuesto para el ejercicio fiscal del próximo año manda un mensaje sobre cuáles son las áreas prioritarias para la administración del presidente Donald Trump y es evidente que le está dando un mayor peso a sus tropas con miras a fortalecer la imagen de su país en el exterior”, comenta el analista político.
Dentro del documento también destaca una importante promesa de campaña: hacer que Estados Unidos pise la Luna en el 2024 y para lograrlo se le destinarán 18 mil millones de dólares a programas espaciales operados por la NASA y el Comando Espacial de Estados Unidos.
Propuestas de Donald Trump, Decisiones difíciles
Con su presupuesto, el presidente Donald Trump piensa en el futuro, sin embargo, no todos están contemplados. De manera general, las agencias federales no defensivas sufrirán una reducción en su gasto por alrededor del 5 por ciento, a 590 mil millones de dólares, por debajo del nivel acordado por el Congreso.
El incremento de los recursos al Departamento de Asuntos de los Veteranos provocará que se convierta en el segundo más grande quitándole la posición al Departamento de Salud y Servicios Humanos, que recibirá 9 por ciento menos.
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No obstante, la agencia que recibirá el mayor descalabro será la de Comercio encabezada por Wilbur Ross con un recorte de 48 por ciento, aun cuando el T-MEC es una de las cartas fuertes para el huésped de la Casa Blanca.
Stephanie Henaro advierte que la solicitud es una estrategia para mantener la atención de su voto duro, aunque el mandatario no desaprovechará que en este momento muchos demócratas están desencantados con su propio partido.
El presidente Trump salió fortalecido tras el juicio político, está respaldado y cuenta con el índice de aprobación más alto que haya tenido. Esta situación le brinda un eje de comunicación política claro que podrá usarlo a su favor en la campaña
Uno de los ejes que afectarán a un mayor número de personas es la reducción de 7.8 por ciento al Departamento de Educación, pues los recortes pondrán fin a los préstamos estudiantiles subsidiados.
También se acabará con el de condonación de préstamos de servicio público, el cual fue impulsado por el expresidente George W. Bush en 2007 y permite a los empleados gubernamentales cancelar sus préstamos estudiantiles después de haberlos pagado a tiempo durante 10 años.
Un posible recorte a estos dos rubros podría desencantar a miles de votantes, en especial si se toma en cuenta que el 80 por ciento de los estadounidenses están a favor de que el gobierno apoye a la ciudadanía con este tipo de préstamos, de acuerdo con un análisis del Centro de Investigaciones Pew.
Juan Pablo Galicia asegura que el paquete tiene un sesgo electoral y está pensado para que se enfrente con los demócratas en el Congreso, aunque la negociación para su aprobación será un elemento que el presidente Trump sabrá manejar.
“Será complicado que los demócratas le den luz verde tan fácil, porque Nancy Pelosi va a querer negociar varios puntos sobre todo los relacionados con los programas sociales, pero eso le va a dar fichas al presidente Donald Trump para jugar con un discurso electoral, ya que argumentará que a sus opositores no les importa proteger a Estados Unidos y por eso no quieren aprobar recursos para las tropas”.
