El fraude del ‘robot’
Brett Arendis, en su publicación en SmartMoney, cuenta la historia de los gemelos Alexander y Thomas Hunter, que a sus 16 años ingeniaron una estafa financiera en Inglaterra.
Estafaban a inversionistas del mercado de valores y manipulaban el valor de las acciones, juntando en 4 años aproximadamente 3 millones de dólares.
¿Cómo lo hicieron? Con el “Robot Recomienda-Acciones”.
Roberta CarrilloBrett Arendis, en su publicación en SmartMoney, cuenta la historia de los gemelos Alexander y Thomas Hunter, que a sus 16 años ingeniaron una estafa financiera en Inglaterra.
Estafaban a inversionistas del mercado de valores y manipulaban el valor de las acciones, juntando en 4 años aproximadamente 3 millones de dólares.
¿Cómo lo hicieron? Con el “Robot Recomienda-Acciones”.
El robot no existía en realidad, pero a partir del 2007 pudieron convencer a alrededor de 75 mil accionistas de suscribirse al boletín del robot que les diría en qué acciones invertir.
Se enfocaban en acciones de valores menores a un dólar, consideradas volátiles y riesgosas ya que en ésas podían influir más. Y es que su manera de elegir qué acciones apoyarían en su boletín no era al azar.
Al mismo tiempo, por medio de su otra compañía, equitypromoter.com, los gemelos estaban recibiendo dinero de promotores para impulsar sus acciones en el boletín. Al ser publicadas, sus suscriptores compraban dichas acciones, causando un alza en el valor de la acción, que era lo que prometían los gemelos que preveía el robot.
Reunieron alrededor de 1.2 millones de dólares por concepto de suscripciones, y otros 1.9 millones de los promotores. También hicieron dinero invirtiendo en acciones que estaban por ser publicadas, comprándolas antes de que comenzaran su ascenso.
Los gemelos ya recibieron sentencias en el Reino Unido, que los obligó a compensar el daño realizado. Uno de ellos, Alexander, tiene una sentencia de 12 meses de cárcel suspendida, lo que quiere decir que está en libertad condicional. Ahora se enfrentan a nuevos procesos en Estados Unidos.
Pero no seamos tan veloces en juzgar. La estafa del robot recomienda-acciones no es tan diferente a los fondos de cobertura corriente y los bancos de Wall Street.
Los Hunter dijeron que el robot era un sofisticado programa de compra venta de acciones producto de investigación y desarrollo intensivo.
Esto mismo dicen los asesores financieros a sus clientes sobre sus algoritmos y analistas, pero nunca parecen funcionar muy bien.
Los bancos también reciben dinero de empresas que quieren vender sus acciones al público, y al mismo tiempo les recomiendan a sus clientes que las compren.