El otro lunes negro
Grecia no es la única preocupación para los mercados financieros globales. Los principales índices accionarios de China sufrieron un lunes negro que podría augurar la transición de un mercado alcista hacia un espiral negativo.
Desde el 12 de junio, el índice Shanghai Composite ha perdido el 20 por ciento de su valor. El lunes cerró con una baja de 3.3 por ciento que estuvo marcada por una fuerte volatilidad.
Rodrigo CarbajalGrecia no es la única preocupación para los mercados financieros globales. Los principales índices accionarios de China sufrieron un lunes negro que podría augurar la transición de un mercado alcista hacia un espiral negativo.
Desde el 12 de junio, el índice Shanghai Composite ha perdido el 20 por ciento de su valor. El lunes cerró con una baja de 3.3 por ciento que estuvo marcada por una fuerte volatilidad.
El índice Shenzhen cayó 6.1 por ciento, borrando todas las ganancias obtenidas desde el 8 de mayo. ChiNext, denominado el Nasdaq chino por incluir pequeñas empresas tecnológicas, perdió 7.9 por ciento de su valor.
Entre los inversionistas, el mercado chino ha sido catalogado como la sensación del año. En lo que va del 2015, el índice Shanghai Composite y el índice Shenzhen han crecido 25 por ciento y 67 por ciento respectivamente.
Esto contrasta con el objetivo oficial de crecimiento de la economía de 7 por ciento para 2015, el más bajo en 25 años.
Blackrock, la firma de administración de activos más grande del mundo, reporta que en una semana de abril se abrieron 4 millones de cuentas para invertir en el mercado bursátil de China.
El lunes terminó el mercado alcista más largo en la historia del país asiático, culminando la peor caída de dos semanas de los últimos 18 años.
Desplome anunciado
El frenesí se convirtió en pánico. Analistas coinciden en que el boom bursátil chino se debe en gran parte a “apuestas apalancadas”.
Un gran número de inversionistas pidieron dinero prestado para sumarse a un mercado cuya alza constante parecía demasiado buena como para perderse.
Ahora, con los precios de las acciones a la baja, las llamadas de margen obligan a esos inversionistas a liquidar sus posiciones para poder pagar a sus acreedores . La venta de activos alimenta la tendencia bajista del mercado y motiva a que se realicen un mayor número de redenciones, llevando a un espiral decadente y repetitivo.
Sin embargo, ésta fue una caída anunciada. Blackrock, Credit Suisse, Group AG y Bank of America advirtieron que la tendencia alcista se trataba de una burbuja donde importaba sólo el sentimiento del mercado y no las variables fundamentales.
El valor de las acciones de las firmas chinas cotiza en promedio 82 veces sus ganancias, su nivel más alto desde el 2007 y cuatro veces más que el promedio en Estados Unidos.
En un intento para forzar un aterrizaje suave, el banco central de China reaccionó con un recorte de 0.25 puntos porcentuales de la tasa de depósito. Asimismo, la tasa de descuento de los bancos se redujo 0.5 puntos porcentuales