Ante la parálisis política en países avanzados, y como se venía notando desde el “Black Friday”, los consumidores impulsaron más de lo esperado al PIB de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
El organismo de 34 miembros con sede en París informó el martes que el consumo privado fue el componente de más crecimiento en el último trimestre del 2012.
El crecimiento real en todos los países incrementó 0.3 por ciento, comparado con 0.2 por ciento en el trimestre anterior.
El consumo privado contribuyó a ese crecimiento con 0.2 puntos porcentuales, mientras que los demás rubros se mantuvieron ligeramente menos emocionantes.
El consumo del gobierno y las acumulaciones de inventario contribuyeron con 0.1 puntos cada uno. Las exportaciones netas contribuyeron todavía menos.
Pero no todas las noticias son buenas.
Las inversiones se mantienen en niveles bajos. La formación bruta de capital se contrajo 0.1 puntos porcentuales por segundo trimestre consecutivo.
Si bien en general, el componente de más expansión fue el consumo privado, no se puede decir lo mismo para algunos países dentro del organismo.
En Francia y Alemania, las exportaciones netas fueron el principal detonante de crecimiento.
Así mismo, en Italia el incremento en las exportaciones se vio contrarrestado por una contracción de igual magnitud en el consumo privado.
En Japón, los consumidores también prefirieron dejar las compras para otro día, contrayendo el consumo en 0.3 puntos.
Lo contrario sucedió en Canadá donde los consumidores contrarrestaron el efecto negativo de la falta de exportaciones.
Pero como en otras ocasiones, quienes parecen elevar el número de consumo privado son los consumidores estadounidenses.
En Estados Unidos, el consumo privado aportó 0.3 puntos porcentuales al crecimiento, un indicio fuerte de recuperación en la economía más grande del mundo.
Los datos anteriores sugieren que, en general, mientras los consumidores parecen estar en mejores condiciones para ir de compras, las empresas se mantienen cautelosas ante un escenario macroeconómico incierto.