Emprendedores, consejos para negociar con tiburones
Muchos emprendedores buscan financiamiento con inversionistas privados, sin embargo, en ocasiones dejan de lado aspectos fundamentales como la participación que están dispuestos a entregar de su empresa con tal de recibir un poco de capital
Nayeli Meza OrozcoEl capital es el combustible de cualquier negocio. Al momento de crecer, los emprendedores cometen muchos errores por desconocimiento o por premura de obtener recursos, sin embargo, a la larga esto puede provocar diversos problemas en la estabilidad de sus finanzas.
Los inversionistas, como fondos de capital, ángeles, plataformas de fondeo colectivo o deuda, son una alternativa eficiente para aquellos que buscan recibir apoyo en tiempos de crisis, más cuando son insuficientes los créditos y convocatorias del gobierno.
El problema surge cuando la búsqueda de estos recursos se convierte en un sacrificio y eso implica que deberán incluso, de entregar a alguien más una parte considerable del negocio.
Antes de firmar cualquier convenio, los emprendedores deben revisar la letra pequeña del contrato, porque negociar con tiburones de capital privado no siempre es tan sencillo como parece y tampoco convencerlos.
Al respecto, Eugenio Perea, Venture Partner en México, del fondo de inversión Magma Partners, opina que la mejor estrategia es contar con un negocio sólido. “Los inversionistas no son personas que regalan dinero solo por que sí, es una cadena”.
1 Emprendedores empiezan muy tarde
Aveces los emprendedores no toman en cuenta el tiempo en que pueden tardarse en ganar la confianza de un inversionista y la negociación de los términos de un contrato, por eso casi siempre toman capital muy tarde.
Juan Luis Hernández Conde, socio fundador de Novus Concilium, comparte que en Silicon Valley cerrar una inversión puede tardar de entre dos a tres meses, en cambio en México esto demora un año o incluso un año y medio.
“El problema de empezar tarde es que cuando te hace falta dinero tienes una posición mucho más desventajosa para negociar y el emprendedor termina aceptando malos contratos por la urgencia que tienen del dinero”.
2 No se tiene un objetivo claro
Cuando se obtiene el dinero, los emprendedores no saben para qué lo necesitan ni en qué lo invertirán. Si no tienen claro qué va a pasar después de levantar capital es un mal inicio.
“Obtener capital es una actividad que requiere de mucho tiempo, esfuerzo, inteligencia y trabajo, por eso hay planearlo bien porque es desgastante, más vale que se haga bien”, asegura Eugenio Perea.
Si un inversionista pide más del 30 por ciento en una ronda de inversión se está lidiando con gente que no es profesional y esto será peligroso en el largo plazo.
3 Piensan que es fácil
Hay emprendedores que creen que a la primera van a poder levantar capital y rara vez esto se cumple, si no cuentan con un equipo que tiene de respaldo una historia previa muy exitosa o se cuenta con un mercado contundente, lograr el objetivo será muy difícil de alcanzar por las condiciones.
“El gran problema de buscar financiamiento cuando no se está preparado es que se queman contactos y capital político al a hablar con gente que no se debería todavía”, precisa Eugenio Perea, Venture Partner en México, del fondo de inversión Magma Partners.
4 No investigan
Entre la misma comunidad, los emprendedores se deben preguntar qué experiencias han tenido con los inversionistas elegidos, qué tal se comportan, si cumplen con sus tratos, si son activos y si se involucran en el proceso.
“Los emprendedores tampoco le preguntan a los propios inversionistas cuáles han sido sus éxitos y sus fracasos. Se recomienda que antes de empezar a negociar cuestionen de tal manera que quienes dan dinero también se tengan que vender”, comparte Juan Luis Hernández Conde.
5 Emprendedores buscan a la gente incorrecta
En el mundo de los negocios existe una falta de entendimiento al analizar qué tipo de empresa es, a qué se dedica, la industria en la que se desarrolla, en qué momento están y al tomar en cuenta eso se deben analizar las opciones de inversión.
Eugenio Perea opina que el error más común es que los emprendedores buscan la opción más fácil cuando cada fondo de inversión es diferente.
“Acudir a fondos diferentes al nicho en el que el emprendedor está y sin una etapa bien definida es una pérdida de tiempo; los futuros empresarios deben aprender a conocer más a los inversionistas”.
6 No se asesoran bien
En el punto de vista legal se necesitan abogados especializados en la materia, advierte Juan Luis Hernández Conde.
“Es necesario que se traigan a la mesa profesionistas con mucha experiencia, pero muchas veces los emprendedores acuden con otros que no pueden cerrar esta clase de inversiones, además es importante que tengan fama de ser facilitadores, pro inversiones y que hayan hecho esto durante mucho tiempo”, refiere el socio fundador de Novus Concilium.