En jaque por combate al huachicoleo
La estrategia contra el robo de combustible ha provocado retrasos en el suministro de gasolina. Aunque la medida ha sido criticada, analistas destacan sus aciertos, pero consideran necesarios ajustes para abatir el delito
Nayeli Meza OrozcoLa primera gran batalla de Pemex en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador es contra el huachicoleo. Para emprender esta cruzada fueron necesarios cambios en la logística de entrega a las estaciones de servicio, situación que ha ocasionado retrasos en la distribución de combustible afectando mayormente a los estados de Hidalgo, Estado de México, Jalisco, Michoacán, Guanajuato y Querétaro.
Esto también ha generado la molestia de decenas de personas que durante el fin de semana pasado batallaron por encontrar alguna gasolinera abierta en esas entidades y cuando la encontraban debían esperar por más de una hora para poder cargar.
Quetzalina Lazcano, habitante de la Zona Metropolitana de Guadalajara, es parte de los afectados del plan que se anunció a finales del año pasado por parte del Gobierno federal, el cual busca detener el robo de combustible a Petróleos Mexicanos (Pemex) que el año pasado le generó pérdidas por 60 mil millones de pesos, según cifras oficiales.
Cuando la ejecutiva comercial acudió a la gasolinera que usualmente visita, esta tenía las luces apagadas y todas sus entradas estaban bloqueadas con botes y mantas en las que se leía la leyenda ‘Fuera de servicio’.
La sorpresa fue mayor cuando poco a poco se fue enterando de lo que ocurría en redes sociales, Para cumplir con el abasto del combustible Pemex utiliza carro-tanques debido a que, hasta ese momento, las autoridades locales no habían proporcionado ninguna información de manera oficial
“Ha sido una situación muy estresante porque esto ha generado compras de pánico entre algunos automovilistas y lo peor fue al inicio porque nadie estaba al tanto de lo que ocurría, ya que el gobierno no nos avisó de esta situación. La gente está molesta porque sus actividades se están viendo afectadas por esta situación”, comparte la tapatía.
La tarde del lunes, el coordinador general estratégico de Crecimiento y Desarrollo Económico, Alejandro Guzmán Larralde, estimó que el abasto de gasolina se normalizará hasta dentro de cinco días.
Datos del gobierno de Jalisco muestran que aproximadamente 60 por ciento de las 450 gasolineras no cuentan con combustible, mientras que en el resto la capacidad es de 40 por ciento.
La tensa situación se replica en los otros estados afectados por el retraso en la distribución del hidrocarburo.
A pesar de este escenario, el Gobierno federal descarta que el país se enfrente a una situación de desabasto y aunque se han generado demoras existe suficiente producto para cubrir la demanda.
“Nuestras Terminales de Almacenamiento y Despacho cuentan con los inventarios suficientes para satisfacer la demanda de la población, por lo que el país no enfrenta desabasto ni escasez de los productos”, informó Pemex en un comunicado.
Como parte de la estrategia del Ejecutivo federal contra los grupos que se dedican al robo de hidrocaburos, elementos del Ejército y Marina permanecerán durante un mes a cargo del control de la seguridad interna y externa en las instalaciones de las refinerías de Cadereyta, Ciudad Madero, Minatitlán, Tula y Salina Cruz.
En días pasados, el presidente López Obrador aseguró que el plan contra el huachicol comenzó a dar resultados al disminuir el robo de pipas de Pemex en pocos días.
El mandatario explicó que mientras que en los 25 días recientes más de mil pipas con 15 mil litros de gasolina cada una fueron sustraídas por las bandas del crimen organizado, el jueves pasado, el número disminuyó a 36.
Medida necesaria
Si bien el plan para acabar con los huachicoleros ha sido duramente criticado por las consecuencias que ha derivado su aplicación, especialistas del sector energético reconocen los aciertos, aunque coinciden en que se deben hacer mejoras en algunos puntos de la estrategia que ha llevado al cierre de ductos de la petrolera mexicana por el cambio en el sistema de distribución a vía terrestre.
Por principio, el especialista del sector energético comparte que el gobierno morenista debe voltear a ver hacia el almacenamiento de combustibles, actividad que se ha mantenido en el olvido en el país desde hace tres décadas.
Apostar a este rubro permitiría al país aumentar la reserva de gasolina en México que, en la actualidad, por la infraestructura del país sólo permite almacenar 17.31 millones de barriles, con los que se garantiza la demanda por hasta tres días, mientras que en Estados Unidos pueden guardar combustibles por hasta tres meses, de acuerdo con la Secretaría de Energía (Sener).
Otro de los elementos a destacar es el tema de transparencia respecto a cómo el gobierno está determinando el precio de la gasolina, pues de no aclararse esto se corre el riesgo de que ocurra lo que pasó en anteriores sexenios.
Arturo Carranza, consultor energético de Mercury LLC, coincide en la exigencia de combatir el huachicoleo, pues en los últimos tres años este delito le ha ocasionado a las finanzas de Pemex un quebrando de 147 mil millones de pesos.
Sin embargo, el asesor de temas energéticos expone que la solución no debe centrarse sólo en utilizar el músculo del Ejército y Marina para resguardar la infraestructura de la petrolera, a pesar de que en el plan participan 15 dependencias del gobierno, pues enfrentar al monstruo del huachicol que se ha apoderado del territorio nacional es más complejo.
“Históricamente el esfuerzo que hace Pemex en esta temporada es extraordinario por todos los eventos que ocurren a inicios de año. El robo de gasolina es un problema de impartición de justicia, con esta medida la pinza no está cerrada del todo, pero si se logra disminuir la incidencia de este delito todo lo que está ocurriendo habrá valido la pena”.