Como una mala decisión, así calificó BBVA Bancomer la cancelación de la terminal aérea que se construía en Texcoco, además de que, dijo, se genera incertidumbre para las inversiones a largo plazo.
Para el director del banco, Eduardo Osuna, la cancelación tendrá un impacto negativo en sus perspectivas económicas ya que el tipo de cambio y la inflación tendrán un sesgo al alza.
En declaraciones que recoge El Economista, el directivo aseveró que las proyecciones de crecimiento serán a la baja, al tiempo que habrá incertidumbre tanto en créditos como inversiones.
Por su parte, Citibanamex aseguró que la decisión implica un deterioro significativo del marco macroeconómico hacia adelante y una señal negativa a los mercados.
En su análisis sobre la decisión del próximo gobierno, la institución financiera detalló que la cancelación de las obras en Texcoco significa “una derrota para el sentido común”.
Abundó que hay dudas sobre la solución al congestionamiento del tráfico aéreo en la zona central de México pues mientras Toluca podría ofrecer un alivio moderado, es poco probable que las dos pistas de aterrizaje propuestas para Santa Lucía obtengan las certificaciones requeridas en un tiempo corto.
Para Citibanamex, la tardanza en las operaciones de Santa Lucía provocará que el tráfico aéreo de 60 millones de personas, que se proyectan para 2025, no pueda ser atendido, como hubiera pasado con el proyecto de Texcoco.