Extrema puja por contenedores en cadenas de suministro
La falta de productos y el alza de precios que se prevé por una mala logística del comercio marítimo global tiene a México compitiendo con sus mejores ofertas para prevenir un desabasto en el Buen Fin y navidad
Irán Y. GarcíaMientras que los buques porta-contenedores echan anclas y esperan a que las cadenas de suministro recuperen su flujo normal, interrumpido por diversas crisis del comercio internacional, en México presentan sus mejores ofertas para poder exportar e importar sus productos a través del transporte marítimo.
Los puertos marítimos comenzaron a registrar una escasez de contenedores que impacta en los costos de fletes. En septiembre de 2020 las rutas de importación de Asia a México, con espacio de aproximadamente 12.19 metros, registraban costos promedios de mil 500 a dos mil dólares en tanto que septiembre de 2021 alcanzaban hasta los 14 mil dólares.
La crisis de contenedores surgió a partir del colapso económico por la pandemia de COVID-19 cuando la población dejó de realizar compras ante la incertidumbre financiera lo que provocó que las embarcaciones se estancaran en los puertos a la espera de una reactivación o retornar vacíos a sus puertos de origen lo que les generó grandes pérdidas económicas.
Actualmente, los países se enfocan en hacer grandes ofertas para exportar e importar productos y seguir satisfaciendo la necesidad de mercancía sobre todo provenientes de China, uno de los principales aliados de importación mundial.
“Estamos teniendo este impacto en donde puede que un importador mexicano está buscando un contendor pero no lo pueda obtener porque el mercado en Chile puede que pague mil 500 dólares más y por demanda el contendor acabe por ir a Chile y no a México”, estimó Gregorio Vázquez director comercial de Drip para Reporte Índigo.
Además de la escasez de contenedores, los países se enfrentan a una competencia por el abastecimiento de productos de materia prima y el sector secundario, lo que desembocó en una sobredemanda de contenedores que México no puede pagar lo que podría derivar en desabastecimiento y alza de precios.
“Las navieras le están dando preferencia a aquellos importadores y exportadores que paguen el costo o la tarifa spot que actualmente son entre 13 a 14 mil dólares por el negocio que pueda representar, hay una carnicería por ver quien puede tomar ese contenedor y todo se va a resumir en un precio”, agregó Gregorio.
La crisis de exportación e importación se ve reflejado sobre todo en el desplome histórico del ensamblaje de autos, el INEGI reportó en septiembre una caída en la producción de autos del 33 por ciento lo que equivale a 103 mil 882 unidades, en gran medida por la falta de suministro de chips y semiconductores.
“México se va a ver afectado sobre todo en el tema de tecnología en cuestión de los chips y toda esta materia prima, pues somos uno de los países en Latinoamérica que más ensamblamos y exportamos”, previó Karla Cosió VP de Gross en entrevista para Reporte Índigo.
Asimismo, se prevé una escasez de productos no de primera necesidad para el Buen Fin y todo el mes de diciembre con especial énfasis en la industria de los textiles, cosméticos, accesorios, mercancía de China y materias primas.
“Para la época de navidad es cuando se va a ver este tipo de inflación un poco más arriba de lo que estábamos esperando, si era un cuatro ahorita será un seis o 6.2 de inflación arriba de los costos y al consumidor final nos va a pegar”, estimó Karla Cosió.
Efecto asiático en los contenedores
Por la vía marítima se mueve 80 por ciento de la mercancía alrededor del mundo y China juega un papel fundamental en este tráfico ya que su pronta recuperación económica causó un flujo opuesto que afectará precios y una falta de productos.
“La escasez de contenedores es una logística inversa mal hecha por China pues arrancó mucho más pronto en exportar que los otros países en mover y regresar los contendores, haciendo que se desfasara y nos afectara a los consumidores de este lado del continente”, consideró Karla Cosió.
La falta de empleados en los puertos para recibir los contenedores y las fábricas cerradas entorpecieron la logística para regresar los contenedores llenos a China quedándose estancados en algunos puertos de las costas del continente americano causando retrasos y ralentizando el flujo para ponernos al día con la logística.
Asimismo, el surgimiento de las variantes del COVID-19 provocaron que China frenara algunos de sus flujos marítimos lo que desencadenó en más problemas de abastecimiento.
El mal clima y el cierre de recintos portuarios como el de Yantián, en Shenzhen, por brotes de coronavirus han sido otros factores que suman a la incertidumbre marítima causada por China dejando una logística mal estructurada.
“Para el segundo trimestre del año ya vamos a ver un decrecimiento en el costo de los fletes, vamos a estar viendo mayor disponibilidad de contenedores y los importadores en México se van a ver alivianados de esta presión”, detalló el director comercial de Drip.