Guerra de acero agrieta construcción
Con materiales para la edificación más caros a causa de la confrontación arancelaria entre México y Estados Unidos, el sector podría experimentar un incremento en sus gastos, situación que obligaría a la industria a tomar medidas para blindarse
Ángel Alcántara Adán“Nosotros como desarrolladores continuaremos invirtiendo en México”
Los materiales de construcción o commodities tienen un aumento de precios sostenido durante este año a causa del encarecimiento del tipo de cambio, lo que tiene un impacto directo en la industria de la construcción mexicana, problema que se ha acentuado con las recientes medidas impuestas por el país al acero estadounidense.
Tan sólo en mayo pasado, los materiales para construir derivados de este metal tuvieron un incremento promedio del 17.03 por ciento, lo que es su alza más importante en lo que va de este año, según un estudio realizado por la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
El aumento está por arriba del promedio de los demás commodities del sector, que sólo registran una subida en el precio promedio del 7 por ciento en el mismo lapso.
Entre los artículos que tuvieron una mayor alza están la varilla con 29.03 por ciento; la maya de acero que aumento 25.3 por ciento; seguido por el alambre, alambrón y láminas metálicas con 23.5 y 6.1 respectivamente.
El volumen de la edificación no se verá afectado por el alza de precios registrados
Sin embargo, este aumento no contempla el arancel impuesto de hasta un 25 por ciento, por el gobierno nacional al acero proveniente de Estados Unidos, por lo que las empresas constructoras de vivienda, desarrollos de uso comercial, mixto o de oficina, podrían ver agrietados sus ganancias, al tener un margen de ganancias menor derivado al aumento de costos de edificación.
Para Eduardo Ramírez, actual presidente de la CMIC, prevee que los costos finales de la construcción no rebasen 3.5 por ciento derivado a los materiales más caros.
“El incremento en los precios de los insumos ya lo veíamos venir, pero si se le suma el tema del acero y al alza en los otros materiales como el cemento vemos un entorno complicado. Esperamos que esto no tenga una afectación mayor al 3.5 por ciento de los costos finales de edificación, pero llamamos a los constructores que no especulen sobre el tema”
Por su parte, Rafael Camacho, analista especializado en infraestructura del Grupo Financiero Ve por Más, añade que el impacto de las medidas arancelarias no tendría una afectación directa en la cantidad de viviendas, edificios o desarrollos en obra.
“En primera instancia puedo decir que no habrá un impacto en el volumen de construcción, ya que influyen otras variables que tienen mayor peso como las tasas de interés, desarrollo económico, la ocupación, entre otros factores. Los anteriores son los que rigen el volumen del levantamiento de estructuras”, dice.
A pesar de esto, el panorama no parece pintar bien para la industria. De acuerdo a la CMIC, al cierre del 2017 se registró una contracción del 1.5 por ciento en el volumen de construcción.
Pero prevé que para este año la cantidad de estructuras crezca a razón del 1 al 2 por ciento.
Los desarrolladores
Hasta el momento los constructores no ven una afectación ante los incrementos de precios y confían en generar empleos.
Uno de estos casos es el Fideicomiso Inmobiliario (Fibra) Danhos, especializado en desarrollar y operar centros comerciales en la Ciudad de México principalmente.
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“Aún no hemos estimado cual será el impacto que tenga el aumento de los precios en nuestro complejo que estamos edificando en la parte norte de la Ciudad de México. La inversión que tenemos programada para este año es de 2 mil millones de pesos, de los cuales se destinará gran parte a este nuevo centro comercial”, revela Elías Mizrahi, director de relación con inversionistas de la Fibra.
El mall será Parque Tepeyac y estará en la zona de Aragón, el cual tendrá un Área Bruta Rentable de 70 mil metros cuadrados y se contempla que estará lista para la primera mitad del 2020.
Danhos anticipó la volatilidad de los precios de materias primas así como la del mercado cambiario. En julio pasado, salieron con un bono a la Bolsa, con el cual lograron recaudar 2 mil 500 millones de pesos, con lo que garantizaron los recursos necesarios para los proyecto del este año.
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“Tenemos una relación muy estrecha con Estados Unidos por el tema del Tratado de Libre Comercio, por lo que evidentemente nos afectan todas estas decisiones. Pero el Fideicomiso tiene inversiones a muy largo plazo (desarrollos comerciales), además de que la macroeconomía del país continúa fuerte. Nosotros como desarrolladores tenemos la certidumbre de continuar invirtiendo en México”.
Medidas aplicables
Ante este entorno de volatilidad, expertos del sector mencionaron algunas medidas en las que empresas del este sector pueden blindarse y de alguna forma salir airosas ante la situación, las cuales según el analista de Ve por Más, van ligadas a las decisiones de cada desarrollador.
“Cada uno de los constructores toma sus medidas, claro que, estas dependen del tamaño de la empresa. Por ejemplo, unos cuentan con sus propias plantas de cemento”
Otros puntos que destacó es fijar los precios de los insumos a un determinado plazo, pero, añade Camacho, que los desarrolladores pequeños serán quienes tengan la mayor afectación.
Para el presidente de la CMIC, son pocas las medidas que se pueden tomar por las actuales afectaciones.
“Nosotros creemos que la repercusión más fuerte la tendrán los propios consumidores estadounidense, por la importación orgánica entre nuestro país y el de ellos. Esperamos que la afectación de los precios no sea tan importante en este momento y que la especulación no suceda”.
