Las Vegas, Roma o París ya no serán los únicos y más deseados destinos turísticos para los viajeros a quienes la crisis sanitaria mundial de 2020 y una necesidad de conexión con otras personas han provocado un cambio en los tipos de experiencias y viajes que demandan.
Además de los destinos turísticos a los que quieren acudir, los viajeros también han evolucionado en el tipo de hospedaje que demandan, la forma en cómo se trasladan, las medidas de seguridad que exigen en el periodo vacacional y hasta la duración de estas experiencias, advirtió Brian Chesky, cofundador y director general de Airbnb, plataforma de servicios de alojamiento.
En el marco de su participación en la Cumbre de la Convención Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), el potente y nuevo jugador del sector turístico mundial explicó que ante uno de los periodos de aislamiento más largos de la historia de la humanidad, las personas buscan experiencias que los “conecten”.
Además, las intenciones de los CEOs de muchas empresas a nivel global para mantener un esquema semipresencial en oficinas y centros laborales también formarán parte de los elementos que transformen a la industria del turismo.
Lo anterior no significa que vaya a reducir la intención de explorar nuevos destinos turísticos por parte de los viajeros, de hecho existe una fuerte demanda acumulada de viajes, advierte el Reporte Global de Tendencias de Viajes elaborado por American Express y presentado en marzo de este año.
Ahora es más atractivo contar con la flexibilidad de poder trabajar mientras se viaja por el mundo que previo a la pandemia, de acuerdo con el 54 por ciento de las personas encuestadas para llevar a cabo este reporte.
Otra característica en la mayoría de los viajeros es que buscan apoyar marcas de viajes sustentables con el 68 por ciento de los encuestados, además la seguridad es una prioridad para el 65 por ciento de los viajeros.
Las empresas que ofertan estos servicios también registran una evolución al avanzar con la automatización en los proceso de las diferentes etapas de los viajes, pronostica Chesky, el líder del portal que ofrece alojamiento a viajeros que registró una caída de sus ingresos por aproximadamente 46 por ciento en 2020 comparado con el 2019.
La empresa ha celebrado convenios con autoridades turísticas de Francia, Tailandia y México para promocionar viajes rurales o destinos turísticos que no son los más visitados tradicionalmente.
“Significa diversidad de comunidades, distribuir la economía en diferentes pueblos del mundo y eso es una verdadera revolución en viajes. Cuando la gente pueda viajar a cualquier lugar va a alterar la manera en cómo nos movemos, viajamos y vivimos”, explicó.
Plataformas de destinos turísticos piden reglas parejas
Las plataformas que ofrecen alojamiento o las modificaciones en los gustos de viajes no rivalizan con el modelo tradicional de hotelería, afirmó Luis Barrios, presidente y director general de Hoteles City Express.
“La razón del viaje y el tipo de viaje es lo que define la demanda. Un departamento en renta es para un tipo de viaje familiar, pero si vas a una celebración de aniversario probablemente prefieres un hotel de cinco estrellas con todas las comodidades, la competencia va seguir creciendo en todos los formatos”, señaló.
Sin embargo, el empresario señaló la importancia de generar un piso parejo en las reglas para ambos jugadores del sector, no sólo al momento de gravar estos servicios, sino en torno a las medidas de protección para los consumidores.
“Que tenga la suficiente regulación de la misma manera que a los establecimientos formales les solicita la ley para fines de protección al consumidor”.
Durante 2019 el sector representó 10.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) global y uno de cada 10 empleos los genera el turismo. Pero el cierre de fronteras y medidas de confinamiento en 2020 sumieron al sector en una de las peores crisis de las que tienen registro, que provocó la pérdida de 62 millones de empleos y una caída del 40 por ciento de su contribución a la economía mundial.