La escasez de agua es un problema que sufren millones de personas en distintas partes del país, por ello el ahorro del líquido vital se ha convertido en una prioridad para la ciudadanía.
Un mexicano consume mil 978 metros cúbicos de agua al año, mientras que el promedio mundial es de mil 385, de acuerdo con datos del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).
Alrededor de 5 por ciento de ese consumo se utiliza en actividades diarias como limpieza personal, mientras que el 95 por ciento restante corresponde a hábitos alimenticios, patrones de consumo y estilo de vida.
Ante la crítica situación que se vive en las ciudades por el desabasto de agua y con el objetivo de que lavar un vehículo no deje de ser una prioridad entre los automovilistas, Kuthumi Palma encontró una oportunidad para realizar este proceso en seco.
“La idea nació para aprovechar el tiempo en el que un auto permanece estacionado, pero, sobre todo, porque veíamos el derroche del líquido que se hace cuando se lava un coche. Estamos gastando el agua en donde no se requiere”, declara el emprendedor.
La huella hídrica promedio de México es de mil 978 metros cúbicos por habitante al año, cifra superior al promedio mundial que es de mil 385 metros cúbicos por habitante al año, según datos de agua.org
En tanto, cifras de Loops revelan que para lavar un carro se gastan cerca de 100 litros de agua. Al tomar en cuenta que esta actividad que se realiza entre dos o tres veces al mes, el consumo en un año supera los mil litros por cada vehículo.
La startup, que opera desde hace dos años en Ciudad de México, emplea en su proceso en seco cuatro fórmulas biodegradables que encapsulan la suciedad y el polvo para elevarlos a la superficie del vehículo donde se remueven con una microfibra que no daña la pintura del coche.
“El proceso es muy sencillo, son técnicas especializadas que se basan en fórmulas biodegradables y orgánicas. Es una cera natural para limpiar, otra para vidrios, una más para molduras y un abrillantador”, explica Palma.
Exportar el negocio
Loops funciona con un esquema similar al de Uber. A través de su aplicación móvil, que opera con iOS y Android, conecta a los usuarios con una persona que asistirá al lugar en el que el vehículo esté estacionado para ahí limpiarlo.
Para expandir su presencia a las principales ciudades del país, la startup mexicana lanzó su apuesta por el modelo de franquicias. Bajo este esquema, la marca se queda con el 15 por ciento del ticket promedio de un servicio, que es de 90 pesos, el 85 por ciento restante se distribuye entre el lavador y el socio local.
En la actualidad, Loops tiene presencia en Querétaro y Guadalajara, y cuenta con 9 mil clientes registrados en la plataforma.
Para el cierre de este año, prevé sumar 6 mil más impulsado por su llegada a otras localidades del país, como Mérida, Puebla y Tlaxcala.
Asimismo, Kuthumi Palma adelanta que durante el próximo año llevarán la plataforma a otros países, ya que tienen negociaciones adelantadas con posibles socios en Argentina, Colombia, Chile,Canadá y Estados Unidos.
“El negocio capta la atención de los inversionistas porque es rentable hacia el futuro. A las personas les resulta sencillo lavar su auto en la cochera, pero ante la escasez de agua se vuelve más atractivo usar servicios como el de Loops”.