Le bajan al precio en EU
A menos de una semana de que se reanude la discusión legislativa sobre la reforma energética impulsada por el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, el precio de la gasolina en México sigue subiendo y consumiendo una proporción cada vez mayor de los ingresos de los mexicanos.
Pero las cosas son muy diferentes del otro lado de la frontera, y los consumidores estadounidenses lo han notado.
Rolando HinojosaA menos de una semana de que se reanude la discusión legislativa sobre la reforma energética impulsada por el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, el precio de la gasolina en México sigue subiendo y consumiendo una proporción cada vez mayor de los ingresos de los mexicanos.
Pero las cosas son muy diferentes del otro lado de la frontera, y los consumidores estadounidenses lo han notado.
En Estados Unidos los precios de la gasolina alcanzaron su nivel más bajo en casi tres años, 0.84 dólares por litro, este martes, parcialmente debido a un boom en su producción petrolera doméstica.
La Asociación Americana de Automóviles (AAA) estima que el precio podría caer a 0.79 dólares por litro a finales del 2013, gracias a una abundancia de petróleo, menor demanda debido a la temporada, y menores precios del petróleo.
En contraste con esto, en México el precio promedio del litro de gasolina durante el tercer trimestre del año fue de 0.91 dólares, más de 8 por ciento mayor que en Estados Unidos.
Esto quiere decir que comprar un litro de gasolina representa poco más del 3 por ciento de los ingresos diarios de un mexicano, mientras que en Estados Unidos la compra de un litro de gasolina es sólo el 0.69 por ciento de los ingresos diarios.
Cambia el panorama
Mientras que los subsidios mexicanos dedicados a mantener la estabilidad del precio de la gasolina y el tipo de cambio alguna vez atrajo a residentes fronterizos de los Estados Unidos a rellenar sus tanques en México, las cosas han cambiado.
El recorte progresivo del subsidio de gasolina en México y el aumento en la producción de hidrocarburos en Estados Unidos han volteado esta relación.
Aunque en Estados Unidos la tendencia va hacia abajo, en México se prevé que en 2014 el costo de la gasolina tendrá un crecimiento de 7.9 por ciento, un incremento de ocho centavos por mes.
Por el lado mexicano, los analistas prevén que esto no cambiará, ya que el actual gobierno federal ha indicado que continuará con la política de recortes a los subsidios. Por otro lado, en Estados Unidos sería necesaria una caída súbita en la producción o un aumento considerable en la demanda de gasolina para aumentar los precios.
The Wall Street Journal reporta que analistas indican que, con las refinerías estadounidenses aun produciendo enormes cantidades de gasolina, se necesitarían semanas de fuerte demanda para eliminar el superávit en la producción.