El aumento de competencia y el éxito del iPhone 6 no han logrado arrebatar de Samsung su reinado de los teléfonos inteligentes. Hoy en día, la empresa surcoreana mantiene la mayor participación del mercado de estos dispositivos.
Sin embargo, la proliferación de pequeños productores que venden teléfonos de bajo costo y el resurgimiento de Apple con el iPhone 6 han golpeado de manera significativa las finanzas de Samsung.
En su reporte del primer trimestre de este año, la empresa registró una caída de 31 por ciento de sus ingresos operativos, lo que equivale aproximadamente a 5 mil 400 millones de dólares.
A pesar de que este representa el sexto trimestre consecutivo en que Samsung reporta pérdidas, los analistas tenían todavía peores expectativas. Si bien podría parecer como un consuelo pequeño, lo que es un hecho es que la última apuesta de la empresa ha rendido frutos.
A pocos meses de que se terminara el año pasado, Samsungo anunció que se iba a enfocar en la producción de componentes para otros teléfonos inteligentes.
En octubre la empresa decidió invertir alrededor de 15 mil millones de dólares en la construcción de una fabrica de chips para dispositivos móviles. La estrategia de expansión considera que la mayoría de los teléfonos celulares en el mundo cuentan actualmente con chip de Samsung.
En ese sentido, ante el crecimiento de los competidores, la compañía ha decidido consolidarse como el principal proveedor de chips, en lugar de enfocarse en consolidar su liderazgo. Esto ha ayudado a aumentar el valor de sus acciones.
A la espera del Galaxy 6
Este viernes el nuevo modelo de teléfono de Samsung Galaxy 6 hará su debut en los mercados. La empresa espera que el lanzamiento sirva para dar un respiro a la caída de ventas.
Aunque la competencia entre Apple y Samsung es de las más mediáticas, las empresas se especializan en nichos de mercados diferentes, por lo que no se “roban” muchos clientes entre sí.
El verdadero peligro para la surcoreana son los productores chinos que fabrican teléfonos de bajo costo y que le han comido gran parte del mercado.
En los países emergentes es donde se encuentran las mejores oportunidades de expansión, pues ahí los teléfonos económicos son la mejor apuesta.
En estos mercados Samsung se enfrenta con empresas chinas como Xiaomi, Lenovo y Huawei.