Contrario de lo que se piensa, las redes sociales pueden mejorar la productividad de las empresas si se utilizan de forma adecuada.
Tener acceso a estas plataformas permite que las personas diversifiquen sus intereses y decidan en qué quieren invertir su tiempo, incluso en horas de trabajo.
Aproximadamente 79.1 millones de los usuarios del ciberespacio tienen al menos cinco redes sociales, de acuerdo con el Estudio sobre los Hábitos de los Usuarios de Internet en México 2018, realizado por la Asociación de Internet.
La atención que se presta a estos espacios digitales incrementa cada año de forma considerable. En la actualidad, los mexicanos pasan 40 por ciento de su tiempo conectados a alguna red social.
En un principio dicha situación significó un problema para las compañías, ya que los tiempos de productividad se redujeron durante el horario laboral, sin embargo, este comportamiento no les representa pérdidas importantes.
Al respecto, Rubén Darío Vázquez, catedrático de la UNAM, asegura que las empresas necesitan formar parte de esta transformación digital, porque no sólo les ayudará a conectar con el público objetivo o clientes potenciales, sino que las oportunidades de comunicación interna que ofrecen podría ayudarles a reafirmar los lazos de confianza con sus trabajadores.
“Es cierto que las redes sociales pueden ser un distractor constante y que un trabajo que se termina en unas horas puede llegar a tardar días, pero se debe tomar en cuenta que los mexicanos son una de las poblaciones que trabaja más y gana menos”, detalla el consultor digital.
Largas jornadas y horas de traslado son factores que intervienen para que los empleados encuentren en las redes sociales un medio para liberar toda su carga.
Vázquez afirma que si las empresas adoptan a las plataformas como una forma de colaboración surgirá un nuevo canal de comunicación con las divisiones de trabajo.
Rubén Darío Vázquez adelanta que el futuro de la forma de trabajar es el home office o desarrollar actividades desde casa, esquema que permitirá no solo a las empresas reducir sus costos de operación también abrir la posibilidad de que los colaboradores tengan más calidad de vida al permitirles administrar su tiempo conforme a sus necesidades.
“Las plataformas digitales y las redes sociales no necesariamente tienen por qué ser un estorbo, ya que manejándolas de manera adecuada pueden convertirse en una herramienta que impulse la productividad laboral”.