"Las fluctuaciones que hemos observado hasta el momento en el precio del petróleo realmente no implican que pudiera haber algún problema, desde el punto de vista del ejercicio del gasto que tiene como sustentos los niveles de ingresos que están en la Ley de Ingresos de la Federación"
Analistas aseguran que México ha cubierto al menos 10 millones de barriles, de los cuales la mitad estipula un precio de 80 dólares
Ante las posibles caídas del petróleo, la Secretaría de Hacienda ejecuta su programa de compra de coberturas petroleras para asegurar los ingresos públicos.
Las coberturas son un instrumento financiero a través del cual se asegura un precio específico en una fecha determinada.
Dependiendo de las condiciones de mercado y la disposición de los operadores a vender al precio presentado por Hacienda se paga una prima por la cobertura.
Del 2008 al 2014 el Gobierno Mexicano ha gastado 6.45 millones de dólares en la contratación de coberturas petroleras.
El fondo mexicano dedicado a esta operación es el más grande de su tipo en el mundo. La magnitud de la compra de coberturas por parte de México es tan grande que tiene fuerte injerencia sobre la demanda y el precio de los instrumentos.
A principios del mes, un reporte de Banamex informó que el Secretario de Hacienda confirmó el inicio del programa de cobertura petrolera para el 2015.
Generalmente, Hacienda inicia sus operaciones de compra en los meses de agosto o septiembre. La información pública disponible apunta que el programa de cobertura comenzó este año hasta el mes de octubre, a pesar de que el precio internacional de referencia ha perdido más del 20 por ciento de su valor desde julio.
El viernes, el precio de la mezcla mexicana de petróleo cerró en 78.15 dólares. Entre más baje el precio del crudo (alejándose de la referencia de 81 dólares) más cara será la prima para la adquisición de una cobertura.
Miguel Messmacher, subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, advirtió en comparecencia ante la Cámara de Diputados sobre esta coyuntura de encarecimiento.
Agregó que el gobierno no dará más detalles de sus operaciones ya que podría incentivar especulaciones en el mercado que hicieran aún más onerosa la compra de coberturas.
El reporte de Banamex estima que el costo total de la operación de cobertura mexicana será de 450 millones de dólares, similar a la del año pasado.
Analistas que siguen los movimientos de este mercado aseguran que México ha cubierto al menos 10 millones de barriles, de los cuáles la mitad estipula un precio de 80 dólares.
El viernes pasado se registró un movimiento adicional en el mercado de estos instrumentos por 5 millones de barriles contratados a 70 dólares.
Especialistas concuerdan que la operación es significativa y que todo apunta a que el comprador es el fondo mexicano de coberturas.
Los nuevos precios de contratación de coberturas divergen de los planes de política económica de la Secretaría de Hacienda para el periodo 2016-2020.
La dependencia federal realizó la planificación de la política económica en base a un escenario donde la contratación de coberturas para este periodo será de 88 dólares por barril.
Optimismo oficial
La Secretaría de Hacienda considera que la baja en el precio del petróleo no ha generado una expectativa de caída en los ingresos petroleros.
Fernando Aportela, subsecretario de Hacienda, argumenta que México cuenta con un andamiaje para enfrentar la volatilidad en el mercado de crudo.
Destaca el saldo positivo de 48.2 mil millones de pesos del Fondo de Estabilización Económica, el mantenimiento de finanzas públicas sanas y un tipo de cambio flexible que absorbe choques externos a la economía real.
Además, dijo que el país cuenta con un nivel de reservas internacionales y una línea de crédito del Fondo Monetario Internacional equivalentes a 20 por ciento del PIB.
El Gobierno Mexicano contrató coberturas petroleras para el 2014 que contemplan un precio internacional de 85 dólares por barril. Actualmente, el precio de referencia mundial supera apenas este umbral al registrar un valor de 85.49 dólares.
Por otro lado, Miguel Messmacher, subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, argumenta que la reciente depreciación del peso mexicano ha compensado la caída del precio del crudo.
Si el peso se debilita, las exportaciones de bienes mexicanos se vuelven más competitivas dado que se abaratan para el comprador externo.
Sin embargo, de acuerdo a cifras del Inegi, las exportaciones petroleras de septiembre cayeron 7 por ciento en términos anuales.
