Los impulsos en la apreciación de ‘Superpeso’ frente al dólar
La “relativa fortaleza” del peso frente al dólar es similar a la de otras divisas de países emergentes y tiene como base la senda inflacionaria de los últimos meses, señalan diversos análisis
María Fernanda NavarroDe diciembre de 2018 a la fecha el peso mexicano registró una apreciación de aproximadamente 3.6 por ciento frente al dólar, un indicador que a la administración del presidente Andrés Manuel López Obrrador le gusta presumir.
Pero las razones de la fortaleza del peso frente al dólar son más complejas que la dirección de las finanzas del país por parte del Gobierno federal y en cambio tienen una relación más directa con la trayectoria inflacionaria de los últimos meses y la política monetaria adoptada por los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico).
“Hay un fenómeno que lo tengo que presumir, ofrezco disculpas, que es el de la apreciación de nuestra moneda, del peso… Están en Wall Street sorprendidos por la fortaleza del peso mexicano”, señaló el mandatario mexicano durante su conferencia de prensa del 1 de junio de 2022.
En las últimas semanas el peso mexicano se mantiene cotizando con “relativa fortaleza”, al alcanzar su mejor nivel del año con alrededor 19.80 pesos por cada dólar; pero no es la única divisa de países emergentes que muestra una tendencia positiva frente a los billetes verdes en lo que va del año, detalla en CIBanco en su análisis “El regreso del peso fuerte: razones y perspectivas para el corto plazo”.
El análisis explica que aunque lo común es que las monedas de países emergentes se vean afectadas durante los ciclos de alzas en las tasas de interés de países desarrollados y escenarios de incertidumbre por la deteriorada economía global, en esta ocasión no ha sido así para las divisas de varios países emergentes como Rusia, Brasil, Perú, Chile, Colombia Sudáfrica y México.
“El fenómeno principal que podría explicar esta situación es la inflación. Ésta se ubica en países desarrollados en niveles no vistos en más de 40 años. Para países emergentes, la inflación también está alta, pero en niveles similares a los de las grandes potencias, lo que ha provocado un atractivo relativo de inversión sobre activos financieros de países emergentes ante el alto diferencial de tasas de interés en comparación a países desarrollados”, explica CIBanco.
En Estados Unidos, por ejemplo, el Índice de Precios al Consumidor registró un aumento de 8.3 por ciento durante abril en su variación anual, de acuerdo con cifras de la Oficina de Estadísticas Laborales de ese país. Este incremento significó un ritmo más lento en el aumento de los precios en comparación con meses anteriores, en el mes previo se registró un aumento de los costos de 8.5 por ciento que significó el nivel más alto en 40 años.
En México, este año también se registraron aumentos históricos en los costos de los productos y servicios. Durante la primera quincena de mayo el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en 7.58 por ciento en su variación anual, que representa 0.07 por ciento menos que la inflación general anual registrada durante la quincena anterior.
Fortaleza pasajera frente al dólar
Pero esta fortaleza del peso mexicano podría ser pasajera, coinciden diversos análisis financieros.
La distorsión actual de las tasas reales de interés va a disminuir en el momento en que empiece a ceder la inflación en países desarrollados, que es donde generalmente ocurre más rápido.
“Esto a cierto nivel podría provocar ajustes en los portafolios de inversión de los inversionistas globales a favor de activos en dólares, presionando a las monedas de países emergentes, incluido al peso mexicano”, detalla CIBanco.