Los retos de Merkel

Los últimos datos oficiales muestran que Europa ha comenzado a mostrar signos de recuperación económica.

Sin embargo, todavía se encuentra lejos de resolver algunos de sus problemas estructurales más importantes que la dejan en riesgo de volver a tropezar.

Los peligros latentes deben ser resueltos lo más pronto posible y gran parte de la responsabilidad recae en Alemania, la potencia económica de la zona euro, liderada por Angela Merkel, recientemente reelegida como canciller.

De acuerdo a un informe publicado por el think tank Bruegel, Europa se enfrenta a tres problemas centrales que deben ser atendidos:

En primer lugar, existe duda sobre la sostentabilidad de la deuda pública por los ajustes insuficientes que se han realizado a la competividad. 

Segundo, la banca continúa fragmentada entre los países europeos, lo que ocasiona condiciones desfavorables para el crecimiento económico, la creación de empleos y la competividad. 

Por último, persisten los altos índices de desempleo que afectan de manera especial a los jóvenes.

Pendientes en la lista

El comunicado de Bruegel especifíca las prioridades que la recién reelegida canciller debe tener como prioridades en su país durante este nuevo periodo de gobierno.

Por un lado, Alemania debe enfocarse en que su política económica contemple una mayor inversión y estímulo para el crecimiento por parte del gobierno y una política de inmigración más inclusiva.

En cuanto a la agenda política que involucra a los países de la zona euro, se menciona que Merkel debe impulsar una unión bancaria integral con mecanismos de control centralizados. Esto significaría transferir una mayor proporción de la soberanía de los países a la Unión Europea.

Para combatir el desempleo juvenil se propone una iniciativa de inversión que involucre fondos europeos, tanto públicos como privados, para fomentar la educación. 

Al mismo tiempo, se recomienda promover reformas al mercado de trabajo para evitar que los jóvenes sean discriminados al momento de solicitar empleo.

En resumen, para que la Unión Europea consolide su recuperación económica es necesario que busque un fortalecimiento de la zona euro con una verdadera transferencia de soberanía por parte de sus miembros más fuertes.