Empezar desde cero
México fue ahora el que amenazó a Estados Unidos con dejar la mesa de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en caso que Donald Trump cumpla con iniciar su salida del pacto comercial para presionar en el proceso.
Los secretarios de Relaciones Exteriores y Economía de México tuvieron ayer, un encuentro clave con sus contrapartes del gobierno de Estados Unidos, donde acordaron trabajar de manera “seria” en la renegociación del TLCAN. Sin embargo, el presidente Donald Trump volvió a la cargada en contra del pacto comercial.
Lourdes González
México fue ahora el que amenazó a Estados Unidos con dejar la mesa de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en caso que Donald Trump cumpla con iniciar su salida del pacto comercial para presionar en el proceso.
Los secretarios de Relaciones Exteriores y Economía de México tuvieron ayer, un encuentro clave con sus contrapartes del gobierno de Estados Unidos, donde acordaron trabajar de manera “seria” en la renegociación del TLCAN. Sin embargo, el presidente Donald Trump volvió a la cargada en contra del pacto comercial.
El canciller mexicano, Luis Videgaray, e Ildefonso Guajardo, de Economía, se reunieron en la Casa Blanca con el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross; el asesor, Jared Kushner y el negociador comercial, Robert Lighthizer.
Videgaray dijo que no sería la ruta correcta ni viable dar por terminado el acuerdo mientras se está renegociando, de acuerdo a la agencia Reuters.
En otra reunión con Rex Tillerson, secretario de Estado de Estados Unidos, el canciller mexicano indicó que México seguirá con las negociaciones desde una perspectiva “seria”, en el proceso ya estructurado y establecido.
“No vamos a negociar ni NAFTA (TLCAN) ni ningún otro tema de la relación bilateral a través de los medios de comunicación o redes sociales”, sostuvo al salir de ese encuentro.
La visita a Washington de ambos funcionarios despertó comentarios, pese a que se insistió que ya estaba programada, y que no se planeó para combatir la hostilidad de la Casa Blanca antes del encuentro del viernes en la ciudad de México.
En un comunicado, la Secretaría de Economía dijo que en la reunión con los funcionarios estadounidenses se revisó de manera general la relación comercial entre México y Estados Unidos y el estado que guarda el proceso de modernización del TLCAN.
Por otro lado, en un comunicado conjunto se expuso que los funcionarios de ambos países revisaron los avances de la primera ronda de negociaciones, que se realizó en Washington del 16 al 20 de agosto, y acordaron seguir impulsando la actualización del tratado comercial, cuya segunda ronda se celebrará del 1 al 5 de septiembre, en la ciudad de México.
Un día antes, en la reunión plenaria de senadores del PRI, el secretario de Economía recordó lo que ya ha insistido sobre el TLCAN, que habrá días buenos, días malos y días peores.
México no está feliz: Trump
El presidente de Estados Unidos aprovechó su gira en Springfield, Missouri, donde expresó que “México no está feliz”, de que Estados Unidos quiera renegociar el TLCAN.
Donald Trump dijo que empezará de cero con un acuerdo comercial de verdad con México.
“Han hecho un montón de dinero por muchos años (…) vamos a cambiar ese acuerdo (TLCAN)”, precisó.
Como ya es costumbre desde su campaña insistió sobre el enorme déficit comercial que registra Estados Unidos con muchos países, y que su administración arreglará uno por uno.
Por eso hizo referencia al proceso de renegociación en marcha del TLCAN, al que calificó como un horrible, terrible acuerdo, que sacó a tantos negocios fuera de Missouri y de otras ciudades.
“Estamos trabajando en ello, veamos qué pasa”, expuso durante su discurso donde abordó sobre su “visión”, para generar empleos y crecimiento económico mediante el recorte de tasas y revisión del sistema fiscal.
La incertidumbre por el TLCAN se colocó en el radar de preocupaciones del Banco de México para el futuro del país, pese a que subió la expectativa de crecimiento económico para el cierre de año a un rango de 2 y 2.5 por ciento, frente al 1.5 y 2.5 por ciento previo.