Para posicionarse como una potencia exportadora, México debe profundizar en la diversificación no solo en cuanto a productos, sino también en lo que hace a los mercados, asegura la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
A pesar de la consolidación de las relaciones comerciales con Estados Unidos y Canadá después de la ratificación del USMCA, el órgano empresarial insiste en que el país debe ir más allá de la firma de este tratado, entre otras cosas, porque la renegociación del TLCAN mostró precisamente la vulnerabilidad que puede conllevar depender tan sustantivamente de una sola región de exportación.
“Si bien la posición geográfica de México determina que América del Norte sea nuestro principal socio comercial, ello no debe traducirse en la desatención de otros mercados que pueden generar estabilidad a la actividad exportadora del País. México debe continuar con la postura de apertura”, señala el comunicado de Coparmex.
En los últimos 25 años el País ha logrado conformar una red de 12 Tratados de Libre Comercio que han abierto las exportaciones a 46 países en Norteamérica, Sudamérica, Europa, Asia y Oceanía, por lo que resulta imprescindible continuar con esa apertura que ha caracterizado la política económica en la última época.
“El comercio internacional de México se ha podido incrementar en buena medida, por una activa política de Estado enfocada en la generación de vínculos comerciales y garantías que han posibilitado el intercambio. Gracias a todo ello, gozamos de una posición privilegiada en términos de competitividad comercial, que permite posicionar nuestras exportaciones en los mercados internacionales”, explica la organización patronal.
Según el órgano empresarial, ha quedado de manifiesto que la falta de diversificación puede amenazar la estabilidad, ya sea por la dependencia total en la exportación de petróleo o depender sustancialmente de un solo mercado, como lo es hoy el de los Estados Unidos.
“En Coparmex consideramos que la apertura económica basada en los acuerdos y tratados binacionales y multilaterales, la competitividad e innovación empresarial, así como el financiamiento y la promoción de las empresas y productos mexicanos en el extranjero, deben mantenerse en una fórmula integral que permita mantener las capacidades exportadoras de México”.
Por último, Coparmex hace un llamado al gobierno federal electo a evaluar la conveniencia de la eventual desaparición de Bancomext (que pasaría a formar parte de Nacional Financiera) y de ProMéxico (cuyas funciones pasarían a las embajadas), debido a que en los últimos años han sido dos organismos de vital importancia para posicionar a México como un país exitoso en materia de comercio exterior.
“Desde luego que la operación de Bancomext y ProMéxico puede mejorarse de forma sustancial para elevar los niveles de exigencia y mejorar los resultados, pero esto puede lograrse con medidas administrativas y operacionales contundentes”.