Problemas apenas comienzan

La filial mexicana de la constructora española Obrascón Huarte Lain (OHL) se ha convertido en un dolor de cabeza para su matriz a raíz de su escándalo de presunta corrupción.

Juan Miguel Villar Mir, director ejecutivo y presidente del consejo administrativo de OHL, se ha dicho “avergonzado” del comportamiento de los involucrados, al mismo tiempo que caracteriza el escándalo como “una campaña de difamación y calumnia”.

El escándalo se desató tras la publicación, por una fuente anónima, de llamadas telefónicas en donde ejecutivos de OHL México discuten presuntas maniobras corruptas como la alteración injustificada de peajes, la compra de influencia de funcionarios públicos del Estado de México, y el pago de sobornos a jueces para obtener sentencias favorables.

Esto ha resultado en la renuncia de Pablo Wallentin, exrepresentante de OHL en México, y de Apolinar Mena, exsecretario de Comunicaciones y Transportes del Estado de México, además de una orden de auditoría de los contratos celebrados entre la empresa y la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT) del Gobierno Federal.

La controversia ha derrumbado el valor de las acciones de OHL México, que la semana pasada arrastraron cuatro jornadas consecutivas de caída en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). 

El cierre del viernes, reflejó el precio más bajo por título para OHL México desde agosto del 2012. Desde el cinco de mayo, cuando se publicaron las primeras grabaciones telefónicas, hasta la fecha su precio se ha desplomado casi 34 por ciento. En el último año, éste ha registrado un declive de alrededor de 43 por ciento.

Escándalo sin freno

Durante el mismo periodo pero del otro lado del Atlántico, el precio de las acciones de OHL ha caído más de 15 por ciento en la Bolsa de Madrid. A un nivel de 17.1 euros por título, también se encuentran en su punto más bajo desde agosto del 2012. 

Este desempeño negativo es reflejo del peso que la filial mexicana tiene dentro de las operaciones de la constructora.

OHL opera en México desde 1979, y el país representa el tercer mayor mercado de la empresa en lo referente a generación de ingresos. En las últimas semanas Villar Mir destacó los casi 60 mil millones de pesos que la empresa ha invertido en el país.

OHL además asegura que siguen estar muy interesados en obtener el contrato de construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México (una obra presupuestada en más de 8 mil millones de pesos).

Sin embargo, analistas financieros señalan que la empresa tendría que emprender cambios fuertes en su administración si quiere recuperar la confianza de los inversionistas y del público.