La Reserva Federal (Fed) cumplió con las expectativas del mercado y subió la tasa de interés de referencia en 25 puntos base, a un rango de entre 0.75 por ciento y 1 por ciento, siendo la tercera ocasión desde la crisis financiera de 2008.
Los banqueros del instituto central mantuvieron prácticamente sin cambios sus proyecciones económicas para el presente año, según lo comunicó Janet Yellen, presidenta del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), en conferencia de prensa.
La mediana de las proyecciones de crecimiento se ubicó en 2.1 por ciento, una cifra similar a la de diciembre, mientras que la mediana de las proyecciones de inflación se mantuvo en 1.9 por ciento.
El comité sigue considerando la posibilidad de sólo dos incrementos adicionales este año, precisó Gabriela Siller, directora de Análisis de Banco Base, en un reporte.
La medida se interpretaría como un enfoque nuevo de las autoridades monetarias estadounidense para contener la inflación ante la expansión de la economía de ese país.
El mercado había dado una probabilidad de 100 por ciento a la decisión de alza en la tasa de referencia debido a los buenos datos económicos de empleo en Estados Unidos que se publicaron la semana pasada.
Mercados reaccionan
Esto provocó un retroceso de forma acelerada en el valor del dólar. El tipo de cambio se apreció de manera significativa para cerrar en 19.55 pesos por dólar en ventanilla; aunque la ganancia de la divisa mexicana también se asoció a la mayor probabilidad de que el Banco de México suba su tasa de referencia al menos 25 puntos base en la próxima reunión del 30 de este mes.
Además, el peso observó la mayor apreciación diaria desde el pasado viernes 3 de marzo, cuando el secretario de Comercio de Estados Unidos adoptó un lenguaje más favorable con respecto a México en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Gabriela Siller destacó que a pesar de la fuerte apreciación del peso, no se puede cantar victoria. Indicó que todavía no inicia la renegociación del TLCAN y que la propuesta de un impuesto de ajuste fronterizo del Partido Republicano representa una amenaza, sobre todo para la industria manufacturera de exportación de México y que podría ser empleada como una estrategia de persuasión durante las negociaciones bilaterales.
Por otro lado, los mercados accionarios de Estados Unidos regresaron a niveles de máximos históricos. El índice industrial Dow Jones llegó a superar la marca de 21 mil puntos.
Ya le tocaba a la Fed
Valeria Moy, directora de México, ¿Cómo Vamos?, coincidió que era esperada la medida de la Fed porque la misma Janet Yellen lo había sugerido.
“Ya había dicho que el ritmo de la política monetaria se iría acelerando (…), el mercado lo tenía bastante descontado”, afirmó.
Por otro lado, el dato de inflación interanual de febrero de Estados Unidos de 2.7 por ciento tendió la cama para que la Fed elevara su tasa de interés de referencia.
“Habla (la subida de tasas) de una recuperación de la economía de Estados Unidos que la verdad se está recuperando en forma importante, finalmente está llegando y está llegando bien”, manifestó.
La también profesora de Economía en el ITAM declaró que al ritmo de la economía estadounidense ya le tocaba el alza en tasas de interés a la Fed.
Asimismo, Valeria Moy expresó que ahora habrá que esperar la publicación de las minutas del banco central para conocer la postura de cada uno de los miembros del comité.
“Vendrán dos o tres subidas en lo que resta del año, que es normal si la economía estadounidense sigue con el ritmo que lleva hasta el momento; no me extrañará, creo que serán alzas paulatinas , de 25 puntos base ”, precisó.
Pero lo interesante es la medida que adoptará el Banco de México porque ya se separó del ciclo de la Fed, por el tema de la inflación.
“Tenemos que ir reaccionando, entonces vamos a ver qué pasa en México, ya nosotros vamos a tener que usar la política monetaria más que otra cosa, para contener la inflación, que está alcanzando niveles fuera de la meta del banco central”, reveló.
Valeria Moy resaltó que las medidas de crecimiento de la administración de Donald Trump son un tema interesante porque al final del día se desconoce cómo se va a generar el estímulo al crecimiento.
“Los gobiernos quieren generar crecimiento. Lo que sugiere el presidente Trump es hacer una política fiscal súper expansiva mediante disminución de impuestos corporativos, repatriación de capitales extranjeros, y un incremento sustancial en el gasto, sobre todo en el gasto de infraestructura”, aseguró.
Esas tres medidas pueden mover la actividad económica en forma importante, lo cual puede ser bueno para Estados Unidos, y en ese sentido la Fed podría incrementar sus tasas.
En el otro lado de la balanza están las finanzas públicas, porque esas medidas fiscales expansivas van a impactar el déficit de Estados Unidos, de modo que el gobierno va a tener que pagar ya que va a recaudar menos y gastar más.
“¿De dónde van a sacar los dólares para pagar la diferencia?, ése se va a volver el tema más interesante”, añadió.
Valeria Moy recomendó que México debe poner atención a la decisión de política económica de la Fed ya que eventualmente Banco de México tendría que reaccionar con subida de tasas de interés.
“Si Banco de México tiene que reaccionar, y eventualmente subir la tasa de interés, que es muy posible, esta subida de tasas de la Fed lo hace todavía más probable, ahí es donde se va a incrementar el costo de deuda”, explicó.